Este jueves 15 de diciembre se anunció de manera oficial el incremento del salario mínimo en Colombia para el próximo año. Las centrales obreras, los gremios y el Gobierno, a través de la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, lograron un acuerdo para incrementarlo en un 16 % y en 20 % el subsidio de transporte.
De esta forma, a partir del primero de enero las personas que devenguen un mínimo recibirán 1.160.000 pesos, pues en este momento se encuentra en 1.000.000 de pesos. Entre tanto, el subsidio de transporte aumentará a 140.606 pesos. Este es un monto adicional que los empleadores deben pagar a quienes ganan el salario mínimo, pero que no constituye base para los pagos relacionados con temas de seguridad social.
Así las cosas, los trabajadores que ganan el mínimo obtendrán diariamente un total de 38.666 pesos, a lo que se suma el monto correspondiente al subsidio de transporte, que será de 4.686 pesos diarios, para un total de 43.352 pesos.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que hay sectores de la economía para los que estos montos no aplican, pues como sucede en el caso del agro, los días se pagan por jornales y son cifras bien diferentes a las de otras actividades como las industriales o del comercio, por ejemplo.
Algo similar ocurre con las personas que trabajan en el servicio doméstico, pues si bien también por ley deben ganar un mínimo, lo cierto es que si trabajan internas parte de ese salario mínimo lo constituye la comida y la dormida, por lo que el monto a pagar en efectivo puede variar y ser menor.
Así se negoció
La negociación del salario mínimo entre el Gobierno, los empresarios y los sindicatos de trabajadores empezó en un piso de 13,77 %, el cual fue resultado de la suma del dato de la inflación a noviembre de 12,53 % más la productividad de 2022, que fue establecida en 1,24 por ciento.
Por su parte, el techo de la discusión fue de un 20 %, que fue la propuesta realizada por las centrales obreras. Esos márgenes se dieron debido a que los empresarios no quisieron comprometerse con una cifra oficial de alza y prefirieron adelantar la discusión para finalmente llegar a un acuerdo.
Los miembros del comité tripartita lograron ponerse de acuerdo en algunos aspectos con el fin de favorecer el poder adquisitivo de los colombianos. Uno de los puntos es que se establecieron compromisos es la revisión de la fórmula con la que se liquidan las tarifas de energía, esto con el fin de que esos costos se reduzcan en los próximos meses.
De igual forma, se pactó revisar las tasas de usura para lograr también un alivio al bolsillo de los hogares, que actualmente enfrentan el pago de créditos bancarios a intereses muy elevados.
El propio presidente Gustavo Petro fue el encargado de dar a conocer los detalles de lo logrado en el marco de la negociación. En el proceso para concertar la cifra se tuvieron en cuenta factores como la inflación, la alta volatilidad de dólar, las subidas de las tasas de interés y las proyecciones de recesión económica para el próximo año.
En el marco de las negociaciones, los trabajadores insistieron en que la devaluación del peso frente al dólar; el aumento de las tarifas en los servicios públicos, en especial los relacionados con energía y gas, y el precio de los combustibles, han generado un importante impacto de la calidad de vida de los colombianos, teniendo en cuenta que desde agosto la inflación consumió el aumento que se había logrado hace un año.