“En Colombia, la asequibilidad de la deuda soberana se deteriorará un poco y el pago de intereses como porcentaje de los ingresos públicos aumentará al 12,5% en 2021 desde menos del 10% en 2015, mientras que el aumento de la carga de la deuda será más pronunciado entre 2019 y 2021”, dijo la calificadora. Según Moody’s, la carga de la deuda del Gobierno pasará al 70% del PIB en 2021, cuando en 2019 fue de 52% del PIB. Lea también: Moody‘s revisaría calificación de Colombia a final de año La proyección de la agencia calificadora es superior a la realizada por el Ministerio de Hacienda que cree que la deuda el próximo año se reducirá del 68% del PIB hasta el 64% del PIB. Para Moody’s, el incremento de la deuda del Gobierno hará que el endeudamiento en moneda extranjera también aumente, razón por la cual la volatilidad y el riesgo del país sería mayor. “Si bien las tasas de interés globales más bajas respaldan la asequibilidad de la deuda, la proporción relativamente grande de la deuda soberana denominada en moneda extranjera, alrededor del 30% del total de Colombia, hace que la asequibilidad de la deuda sea sensible a una mayor ampliación de los diferenciales soberanos o a un aumento futuro de las tasas de interés globales”, dijo Moody’s. Agregó que la exposición del país a la volatilidad del precio del petróleo y los déficits en cuenta corriente moderados impulsan la sensibilidad de la asequibilidad de la deuda a un retroceso de los inversores de los mercados emergentes. En lo relacionado con las tasas de interés, la calificadora cree que las tasas bajas deberían ayudar a un repunte de la actividad económica y posiblemente mejorar la capacidad de los prestatarios para pagar la deuda. Lea también: Así ven las calificadoras de riesgo a la economía colombiana “Los altos niveles de provisiones han perjudicado la rentabilidad bancaria en 2020, lo que refleja los altos niveles de refinanciación y reestructuración”, indicó. La firma considera que las tasas de interés de países como Brasil, Chile, Colombia, México y Perú permanecerán bajas durante los próximos años, “independientemente del rumbo que tome la recuperación económica”.