El gobierno de Iván Duque, que se posesionará el próximo 7 de agosto, ha dicho en privado que tres serán sus tareas prioritarias en materia económica: poner la casa en orden, adelgazar un poco el Estado y equilibrar las finanzas públicas para frenar el déficit fiscal. Pero una vez organice estos temas, el siguiente paso será definir los sectores más promisorios para reactivar la economía, y allí las industrias creativas tendrán un lugar de preferencia.Puede leer: En Colombia no solo hay café. También tenemos economíanaranjaEse sector aporta cerca del 3,3 por ciento al producto interno bruto del país, produce ingresos a precios de mercado por unos 12.400 millones de dólares y crea oportunidades laborales para más de 1,2 millones de personas, lo que implica un aporte a la generación de empleos del 5,8 por ciento. Por eso, se da por descontada la inclusión de este tema en el Plan Nacional de Desarrollo que comenzará a trabajar el nuevo gobierno en los próximos meses. Entre sus prioridades tendrá incluir, por primera vez, la creación de un Viceministerio de Economía Naranja dentro del Ministerio de Cultura. Esta dependencia tendrá a su cargo articularse con otras entidades del gobierno, entre ellas con el MinTIC en temas de tecnología o con MinEducación, para mejorar la formación de competencias que requieren los estudiantes de áreas como diseño o música, entre otras.El economista Felipe Buitrago, coautor con Iván Duque del libro Economía naranja, una oportunidad infinita, es el más firme candidato a ocupar la dirección del Departamento Nacional de Planeación. Estuvo entre los principales promotores de la Ley de Economía Naranja aprobada el año pasado en el Congreso, y durante la campaña presidencial impulsó la economía creativa como una de las grandes autopistas de desarrollo del país en los próximos cuatro años. ¿En qué consiste el plan para impulsar la economía naranja en el país?Entre sus prioridades tendrá incluir, por primera vez, la creación de un Viceministerio de Economía Naranja dentro del Ministerio de Cultura.Siete ejes guían la Ley 1834 de mayo de 2017 de Economía Naranja, cuya reglamentación está pendiente. El primero es la información, pues según Buitrago, uno de los principales problemas del sector reside en la ausencia de cifras actualizadas para tener certeza de la dimensión e impacto del sector. En Colombia el Dane compila estas cifras por medio de la Cuenta Satélite, pero no las elabora en la forma tan oportuna como se requeriría, y por esa razón la idea es avanzar significativamente en este campo. El nuevo gobierno espera que para 2025 las industrias creativas logren duplicar su aporte al PIB del país.El segundo es la institucionalidad. El país necesita instituciones fuertes para que los colombianos vean el tema de la cultura no como un asunto del gobierno, sino de ellos mismos. Además, para que las empresas puedan desarrollar la responsabilidad social cultural. El tercer foco es la infraestructura, de manera que no solo las grandes ciudades cuenten con espacios públicos para la cultura, museos o teatros, sino que en todo el país la sociedad civil pueda tener acceso a estas industrias creativas. El cuarto tema es de industria, para consolidar clústeres de creación en artes, gastronomía, música, cultura, turismo, entre otros, promovidos por medio de las Áreas de Desarrollo Naranja (ADN), un concepto ya adoptado por el alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, en el Bronx. La integración comercial es el quinto eje, para abrir los productos culturales a otros mercados. “Hemos sido poco activos con nuestra diplomacia comercial de nuestras economías creativas”, reconoce Buitrago, quien trae a colación una frase que pronunciaba el príncipe de Gales, que decía que el comercio sigue a las películas.Le sugerimos: En Bogotá DW entrega premios de periodismo sobre economía creativaEl sexto tema es el de inclusión, para permitir que las artes hagan parte de la vida diaria y, al mismo tiempo, faciliten a muchos colombianos tener una opción adicional para mejorar sus realidades económicas. Y el séptimo eje es el de la inspiración, que no solo permite la creación, sino que además es una de las mejores formas de anticiparse al futuro. Buitrago destaca que, por ejemplo, la serie Star Trek, de los años setenta, inspiró las puertas automáticas al darles ideas a los científicos para desarrollar esa tecnología.El próximo gobierno explorará la economía naranja como una nueva veta de riqueza para la economía nacional. Sin duda, ese nuevo polo podría mejorar la generación de empleos y aportar riqueza para el país.