La inteligencia del pulpo, un animal con cuatro cerebros y que en algunas especies alcanza los seis, es una de las inspiraciones de la empresa caleña Octopus Force. Esta compañía, en nueve años, ha roto varios estereotipos al demostrar que en Colombia sí se produce tecnología de última generación y que, además, la pueden hacer mujeres. Su CEO y fundadora, la ingeniera Lorena Valencia, es prueba de ello.

Octopus Force lleva varios años presente en el ranking de innovación y este 2023 llegó al top 5 gracias a su convicción de que es necesario cambiar la mente de las empresas nacionales, las cuales importan 95 por ciento de la tecnología que utilizan. “Lo que hacemos es ayudarles a innovar no como consultores, sino fabricando acá en el país las máquinas que requieren. Somos desarrolladores tecnológicos que les vendemos innovación para que las empresas la usen en sus procesos o creen otras líneas de negocio”, explica Valencia.

El robot DID de Octopus Force limpia el 99 % de los entornos, dejándolos libres del coronavirus. | Foto: Foto: Lorena Valencia - Octopus Force

Con un poco más de 200 empleados en todo el país e, incluso, en el exterior, esta compañía también desarrolla sus inventos más rápido que el promedio mundial, en un lapso de entre cuatro y seis meses.

Actualmente, tienen siete patentes, aunque han creado más de 150 innovaciones, que, si bien están patentadas en su mayoría, son propiedad de los empresarios que las mandaron elaborar.

Comenzaron fabricando un equipo para trasplante de órganos que requería un médico de la Universidad del Valle, cuyo objetivo es que cualquier persona pueda ser el donante ideal para quien necesita el órgano. A este invento lo siguieron un robot de desinfección, una plantadora para huerta casera, trabajan en carros eléctricos y audífonos para personas con problemas de audición. Todo esto lo hacen no solo para ayudar en la soberanía tecnológica de Colombia, sino también para cumplir con los ODS, en particular los que buscan mejorar el bienestar y la salud, la equidad de género, promover el trabajo decente y el crecimiento económico.

Atracción de talento

Pese a ser una Pyme, Octopus Force es una de las empresas del país que tiene más PhD en su nómina. Un total de 20 y aunque existe la creencia de que es tipo de profesionales altamente calificados son difíciles de atraer, Valencia señala que su ventaja es que tienen mucha maquinaria especializada y tecnología en los 1.500 cuadrados que ocupan sus instalaciones y eso les interesa a quienes son apasionados por la investigación.

“Nuestra rápida capacidad de innovar nos permite sacar mensualmente 30 productos para las empresas que nos contratan, mientras que a otros sectores les toma de dos a tres años sacar un nuevo producto. Producimos robots, maquinaria con electrónica, con mecatrónica, con hidráulica y con neumática y esas capacidades se las ofrecemos a las empresas para que ellas puedan innovar de una forma mucho más económica que con cualquier proveedor de otro país”, explica esta CEO e inventora.

Agrega que no producen máquinas genéricas para que les sirvan a varios empresarios o que hagan una sola función. Lo de ellos son máquinas especializadas para necesidades específicas o le ayudan a una compañía cuando quiere producir una innovación que no está en el mercado. “Entonces, como tenemos esta mano de obra calificada para varios proyectos, se nos hace mucho más económico que a una empresa que se dedica a una sola cosa. Es una economía de escala en la que le vendemos nuestra capacidad de innovación a las empresas colombianas para que estas no tengan que invertir tanto dinero en recursos humanos, maquinaria e investigación”, reitera.

Inventos de Octopus Force | Foto: Octopus Force

Según Valencia tener numerosos investigadores les permite determinar la ruta hacia dónde van con cada tecnología. No tiene una invención favorita de las que han hecho en Octopus Force porque dice que cada vez que desarrollan un equipo, ellos mismos terminan sorprendiéndose. “Cada innovación tiene su complejidad. Realmente hacer un producto tecnológico es una aventura y nos alegra mucho verlo moverse o hacer las funciones que necesitamos que haga, así como ver al cliente o al empresario feliz porque su máquina funciona y sabe que le va a resolver sus problemas”.