Los perros de soporte emocional están volviéndose cada vez más necesarios para los humanos. Por ello, la aerolínea Latam anunció un cambio en las políticas de transporte de esos animales que acompañan a las personas porque a veces son solas o porque tienen dificultades sicológicas.
Las medidas entrarán a regir a partir de este lunes 3 de junio, y aplicarán para brindar mayor seguridad a esas mascotas que tienen un papel fundamental en las personas que requieren ese apoyo emocional de los animales.
Las nuevas reglas “tienen como objetivo reducir los riesgos asociados con el transporte de animales no entrenados en la cabina”, dijo la aerolínea a través de un comunicado a la opinión pública.
¿Cuáles son las novedades?
1. El peso importa.
Como los animales viajan en cabina, la aerolínea puso un nuevo límite en materia de peso de los perros que son soporte emocional.
De esa manera, el perro que viaja en el avión deberá tener hasta 12 kilos.
En caso de que el animal supere ese límite, serán transportados de manera gratuita en la bodega del avión.
En ese sentido, la empresa de transporte aéreo recordó a los viajeros que, para que la mascota pueda viajar en la bodega, se tienen que cumplir ciertos requisitos, los cuales, le son informados previamente por la aerolínea a cada pasajero.
Sin embargo, dentro de lo básico está que debe ir en un contenedor y con toda la documentación necesaria para confirmar el origen, conexión (si la hay) y el destino del pasajero, para el cual, la mascota es la compañía.
Tierno, pero debe llevar bozal
De acuerdo con las medidas anunciadas por la aerolínea, desde este lunes 3 de junio será obligatorio el uso del bozal, para los perros que viajan como acompañantes emocionales.
“La mascota deberá usarlo desde el momento del embarque hasta el desembarque”, confirmó la aerolínea.
En caso de que se trate de un perro de raza pequeña, que dispongan de un guacal o kennel que quepa bajo el asiento delantero, no será necesario el bozal. Esto, “siempre y cuando la mascota permanezca en él durante todo el vuelo”, subrayó la empresa de transporte.
¿Y si compro un asiento extra?
Muchos pasajeros que dependen emocionalmente del perro no quieren estar muy lejos de ellos. Inclusive, intentan comprar un asiento extra para que el animal pueda ir a su lado.
Por ello, la aerolínea anunció que habilitó la opción de comprar un asiento adicional para un perro, lo que, en la práctica, no significa que la mascota vaya sentada en uno de los asientos que están dispuestos para los humanos.
Pero eso sí, este no debe tener más de 12 kilos. “La mascota deberá permanecer siempre en el suelo, ya que no está permitido que utilicen los asientos”, enfatizó la aerolínea.
¿Y si el tiquete del perro fue comprado antes del cambio de política?
La aerolínea informó que, en caso de que las personas hayan comprado los tiquetes antes de que se introdujeran los cambios en las políticas de transporte de perros acompañantes emocionales, las condiciones del servicio serán las vigentes en el momento de la compra.
En todo caso, la recomendación puntual es que los pasajeros que viajen con perros de soporte emocional estén revisando las nuevas políticas y, principalmente, las solicitudes de transporte de los animales se hagan al menos con 48 horas de anticipación.
Esto, principalmente, porque se trata de nuevas políticas, requieren evaluación de requisitos para su estricto cumplimiento, y porque también, el transporte de los animales dependerá de la disponibilidad de cupo en el vuelo.