Tal como sucede cada año, Gobierno, centrales obreras y representantes de los empleadores se sientan en la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Laborales y Salariales con el propósito de definir la nueva asignación mínima legal que se aplicará a partir del primero de enero de 2023.
Entre las consideraciones que se tienen en cuenta para fijar este monto se encuentran, entre otros la inflación, la disparada del dólar, la devaluación del peso colombiano, el decrecimiento de las empresas y la inestabilidad económica como consecuencia de la recesión que se prevé para el próximo año.
Es la primera mesa de concertación en el Gobierno del presidente Gustavo Petro desde que asumió el cargo el pasado 7 de agosto y desde ya algunos sectores han considerado que no serán fáciles los diálogos, especialmente, por el impacto que puede tener la inflación con el aumento que se acuerde.
En medio de ese panorama, la Confederación de Pensionados de Colombia entregó a la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, una propuesta de incremento del salario mínimo.
En ese sentido, la agremiación señaló que este aumento no debe ser inferior al 17 %, teniendo en cuenta las diferentes variables que se manejan del salario mínimo, las cuales están disparadas, según señaló.
El presidente de la Confederación, José Antonio Forero, señaló tras la reunión de la Mesa de Productividad, que lo que se busca con este porcentaje es que no se afecte el poder adquisitivo de los colombianos, especialmente, de los pensionados.
En su concepto, esta situación la vivieron, los trabajadores y pensionados, como consecuencia de la inflación de este año frente al aumento del salario mínimo del año pasado.
“Nosotros, cómo pensionados hemos dejado en la mesa de la ministra y en unos miembros del comité que consideramos, que el aumento del salario mínimo para el año entrante, no debe ser inferior a un 17 %”, dijo.
Y agregó que “la inflación hasta ahora va por encima del 12 %, la inflación para el año entrante han dicho que estará entre el 8 %. Consideramos que para recuperar lo que se ha perdido, el aumento debe estar por encima del 17 %”.
Forero señaló que, adicionalmente, los pensionados pidieron al Gobierno que se tomen las medidas necesarias, para que los servicios públicos y las tarifas no aumenten, por lo que se planteó la posibilidad de congelarlas o que no impacten los ingresos de los pensionados.
“Esto es necesario hacerlo porque en menos de cuatro meses ya tenemos absorbido todo el aumento del salario mínimo. Esa es la propuesta que tenemos”, indicó.
Al insistir en un 17 % de incremento del salario mínimo, aseguró que “lo importante es recuperar el poder adquisitivo de lo que reciben los trabajadores y los pensionados”.
Propuesta de Fedesarrollo
Entre tanto, la Fundación para la Educación Superior y el Desarrollo (Fedesarrollo) propuso un aumento 13,5 %, del salario mínimo para 2023 con lo cual este quedaría en 1.135.000 pesos.
El presidente de este centro de pensamiento, Luis Fernando Mejía, la propuesta está basada en cálculos que indican que “la suma de una inflación esperada para 2022 de 12,3 % y un estimativo de crecimiento de la productividad total de los factores de 1,2 % indican que técnicamente el salario mínimo debería aumentar un 13,5 % en 2023″.
Añadió que “entre otros elementos, la discusión del aumento del salario mínimo en el contexto de la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Salariales y Laborales debe tener en cuenta la importante desaceleración del crecimiento económico para el próximo año, que pasará de crecer 7,7% en 2022 a 1,5% en 2023″.
Igualmente, señaló que es importante considerar “la alta incidencia de la informalidad laboral en el total nacional, que continúa cerca del 60 % de la población ocupada”.
Para Mejía, también se debe tener en el radar la alta tasa de desempleo que, a pesar de un crecimiento de la actividad económica cercano al 9 % en 2021 y 2022, continúa en promedio por encima del 11 %.
Destacó, así mismo que cerca de la mitad de los ocupados en Colombia tienen ingresos inferiores a un salario mínimo y resaltó que se debe trabajar también sobre este grupo de personas.
“Aumentos del salario mínimo superiores al sugerido por la regla de inflación causada y productividad pueden generar presiones adicionales al alza en la inflación del próximo año, puesto que una buena parte de esos aumentos en exceso podrían ser trasladados a los consumidores vía mayores precios de los bienes finales”, puntualizó Mejía.