Después de escuchar las situaciones que atraviesan, en un par de audiencias públicas, la más reciente de las cuales fue el 4 de junio, la Superintendencia de Sociedades confirmó que las empresas Industria Colombiana de Confecciones S.A. (Alberto VO5) y Escamval y Cía. fueron admitidas para iniciar proceso de reorganización empresarial con el fin de intentar poner al día sus obligaciones.
Por el lado de Alberto VO5, se trata de una famosa empresa que fabrica prendas de vestir que tiene más de 50 años. Su sede principal es en Pereira, pero logró desplegar tiendas en todo el país. Vende en el mercado local y también en el internacional.
Bautizada con ese nombre por las iniciales de su fundador, Alberto Vallejo (Q. E. P. D.), llegó a tener a Estados Unidos como uno de sus principales destinos de exportación, lo que le permitió obtener ingresos de millones de dólares en el pasado.
Entre tanto, Escamval y Cía. S en C.A., también de origen risaraldense, es un jugador en el sector inmobiliario. Nació casi para los mismos tiempos que Alberto VO5, y ahora, ambas entran en reorganización empresarial.
Por el empleo
Según confirmó la SuperSociedades, la Ley de insolvencia les dará la oportunidad de continuar con el desarrollo de sus operaciones.
Pero lo más importante es que la reorganización dará la oportunidad de salvaguardar los empleos, ya que se trata de al menos 773 puestos de trabajo, la mayoría de planta: 630, mientras que hay 143 empleos temporales.
Diez años para pagar
“Con la aprobación impartida por la Superintendencia a los acuerdos de reorganización, Industria Colombiana de Confecciones S.A. (Alberto VO5) reestructuró obligaciones de 62.436′114.183 pesos por concepto de capital, y en el caso Escamval y Cía. S en C.A., pasivos por 16.186′069.723 pesos, para ser pagados en un término de diez años”.
Empresas en crisis
Según sostuvo el superintendente de sociedades, Billy Escobar, “no solo en este, sino en todos los casos, la reorganización empresarial es proceso de acompañamiento a las empresas en crisis, en todos los sectores de la economía”.
En el caso particular de Alberto VO5 y Escamval, se trata de proteger a empresas tradicionales y representativas de la región.
Hay que recordar que, según las cifras de la Superintendencia de Sociedades, al cierre de 2023, los procesos de insolvencia empresarial –incluidos los de reorganización, acuerdos en ejecución y los de liquidación– sumaban 4.473, una cifra no solo superior a la de los tres años anteriores, sino también a la de 2019, cuando aún no se había decretado la pandemia.