Ecopetrol es tal vez una de las empresas más importantes del país. Con décadas de historia, la petrolera ha creado con los años un rentable negocio a través de la comercialización, explotación, producción, transporte y otros procesos con los hidrocarburos, presentes en suelo colombiano y que abundan en este.
La petrolera había enfrentado algunas crisis en el pasado, de las que pudo recuperarse satisfactoriamente. Sin embargo, con la llegada del Gobierno Petro ahora enfrenta una caída de la que no ha sido fácil levantarse. La actual administración ha impulsado la descarbonización de la economía y con ello la eliminación paulatina de los negocios de hidrocarburos del país, lo que supone el fin en algún futuro de esta empresa y otras que funcionan en el país, sean extranjeras o colombianas.
Aunque el mandatario ha asegurado que su iniciativa busca migrar a Ecopetrol hacia una empresa de energía, más que hidrocarburos, lo cierto es que el proceso no es nada fácil, pues es importante tener en cuenta que la petrolera cuenta con gran experiencia en la explotación de crudo y gas, y que su negocio principal nunca ha estado centrado en las energías renovables, aunque en varias ocasiones ha apostado por estas.
Fitch Ratings hace advertencia y preocupa por estado de Ecopetrol
Hace algunos días la prestigiosa agencia de calificación crediticia reveló que mantuvo la calificación AAA(col) con perspectiva estable y en F1+COL para la empresa, además de las calificaciones nacionales de largo y corto plazo de Ecopetrol. Al mismo tiempo, afirmó las calificaciones de la emisión de bonos por 1 billón de pesos y la de la emisión de bonos y papeles comerciales por COP 3 billones en ‘AAA(col)’ y ‘F1+(col)’, en el mismo orden.
Dichas calificaciones fueron establecidas bajo algunos factores que describe Fitch en su comunicado. El primero se refiere al vínculo con el soberano. Este refleja el vínculo fuerte de Ecopetrol con el perfil crediticio de Colombia. “También incorporan los incentivos significantes del Gobierno colombiano para apoyar a Ecopetrol en caso de dificultades financieras, dada la importancia estratégica de la compañía para el país, ya que abastece la demanda de combustibles líquidos en Colombia y posee 100 % de la capacidad de refinación del país”, indicó.
Apuntan a que la caja de Ecopetrol se ve moderadamente afectada por la recepción de fondos del Gobierno colombiano a través del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC), para compensar el margen de venta de gasolina y diésel en el mercado local a precios más bajos con respecto al mercado de exportación.
“Fitch espera que el saldo en la cuenta FEPC disminuya en la medida en que el Gobierno colombiano continúe realizando aumentos consecutivos de los precios minoristas de combustibles. Durante 2022, el precio de la gasolina fue ajustado en COP 600 por galón y, adicionalmente, en COP 4.220 por galón durante nueve meses de 2023. Adicionalmente, en junio de 2024 se publicó el Decreto 0763, que iguala el precio internacional del diésel para grandes consumidores en Colombia”, comentó.
Gobernanza debilitada
Los eventos recientes de Ecopetrol, frente a las adquisiciones estratégicas y la composición de la junta directiva han centrado la atención en la evaluación y la composición de la junta directiva, además de la gobernanza de la empresa.
“A pesar reconocer la solidez de la gobernanza y los estatutos establecidos para asegurar la independencia del accionista mayoritario, las últimas decisiones generan dudas sobre el grado de independencia del consejo de la junta directiva”, puntualizaron.
Finalmente, la renuncia de miembros de la junta y las reacciones del mercado ante preocupaciones gerenciales evidencian un ruido en torno a la solidez de los marcos de gobernanza. Dicho panorama podría tener un impacto en el desempeño operativo futuro en términos de adición de reservas y producción, así como en la capacidad de acceder al mercado de bonos de manera efectiva y eficiente.