Con un crecimiento de ventas del 19 por ciento frente a 2021, una participación de mercado del 16 por ciento y el segundo lugar entre las marcas preferidas por los colombianos, en General Motors (GM) califican el 2022 como un buen año.
Fueron varios hitos los que vivió esta firma el año pasado. En el marco de la transición energética mundial, General Motors presentó en 2022 su estrategia de electrificación en Suramérica, y en Colombia lanzó su primer vehículo eléctrico Chevrolet Bolt EUV, que ha tenido gran acogida, resalta Santiago Ángel Urdinola, director de Relaciones de Gobierno, Comunicaciones y Responsabilidad Corporativa de General Motors para Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador y Perú.
El segundo hito de GM, el año pasado, fue el inicio del proyecto de reindustrialización en Colombia: “Empezamos a trabajar, a comprar todos los insumos y materiales necesarios para volver a producir”. Como resultado salió el modelo Chevrolet Joy, un vehículo producido y ensamblado en el país, en la gama de automóviles livianos.
Esa apuesta conllevó una inversión de 50 millones de dólares, es decir, más de 187.000 millones de pesos, para la modernización de su planta de producción de vehículos livianos en Colombia. Con esa apuesta dinamizó la industria automotriz del país, y se destacó entre las 1.000 empresas más grandes de Colombia como una de las que más invirtieron en 2022.
El tercer hito en Colombia, que resalta Ángel, es que fue un año récord en producción de camiones en la planta de Colmotores. Y hay un cuarto logro que se dio con el modelo Ónix turbo, que fue uno de los vehículos más vendidos en Colombia con más de 10.000 unidades. “Fue un año interesantísimo, un año lleno de sorpresas donde vivimos una transición saliendo de la pandemia a la, digamos, normalidad empresarial, en la que tuvimos grandes anuncios y medidas que pudimos comunicar”, dijo Ángel Urdinola.
Un año distinto
Las sorpresas del presente año no han sido tan positivas como las de 2022 para esta empresa: primero, se da una contracción de mercado importante, “que ha caído en lo que va del año en más del 20 por ciento frente a lo que vimos el año anterior… Entonces, eso hace que sea un año que arrancó siendo muy retador”, explicó Ángel.
Y aunque en liderazgo siguen en segundo lugar, “no podemos ocultar que es un año distinto al que tuvimos en 2022”, aclaró.
Sin embargo, es en 2023 cuando se materializa el nuevo vehículo colombiano Joy, que sale de la planta de producción para los concesionarios, “y eso nos hace ser optimistas con respecto a que el segundo semestre va a ser mejor en la medida que ya tenemos nuestro carro hecho en Colombia para poder llegar a las vitrinas de nuestros concesionarios apostándole a que este vehículo sea como lo ha sido Ónix turbo: un vehículo líder en su categoría y que pueda, un poquito, mejorar las cifras del primer semestre”, auguró Ángel Urdinola.
La segunda gran expectativa es que GM Colombia empezó exportaciones nuevamente. Se están llevando los primeros vehículos a Ecuador y están rumbo a Argentina también para poder nacionalizarlos. “Tenemos dos insumos exportadores que para nosotros son absolutamente vitales para retomar la senda exportadora de General Motors”.Con el reinicio de la producción en la planta, este año, GM mejora sus indicadores de diversidad de género, al contratar 300 trabajadores, de los cuales entre 60 y 70 por ciento son mujeres. “Y eso hace que sea un año lleno de sentimientos encontrados: unos dulces y otros retadores”.
En esta multinacional también apuestan por el lanzamiento de la pickup Chevrolet Montana, la cual fue desarrollada desde cero en su planta de producción de Brasil. Los directivos en Colombia se muestran optimistas y confían en que con los nuevos lanzamientos podrán cumplir sus objetivos. Además, tienen la expectativa de que el mercado nacional podrá recuperar la senda de crecimiento que experimentó en 2022.
Aunque la foto a la fecha es negativa, las esperanzas están centradas en el segundo semestre, “porque si analizamos las ventas del primer trimestre tal vez no lleguemos a la meta inicial de vender 250.000 vehículos. Por eso, la hemos revaluado y, siendo optimistas, creo que llegaremos a las 200.000 unidades”, explica la cabeza de GM en el país.
Nuevos retos
Con el nuevo escenario nacional, las medidas y reformas expuestas por el Gobierno, GM Colombia ha sido puesto como ejemplo por su proyecto de reindustrialización. Mover nuevamente una planta, ensamblar un nuevo vehículo en casa, más el ensamble de camiones, son grandes apuestas que han permitido un diálogo franco sobre la industrialización como política nacional.
Así lo manifiesta el director de Relaciones de Gobierno, Comunicaciones y Responsabilidad Corporativa de General Motors para Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador y Perú, quien reconoce también que no ha sido un año fácil: “Es un año que nos recibe con una caída de la industria bastante interesante y retadora, y eso hace que todos como sector automotriz estemos, sin lugar a duda, preocupados”.
Les inquieta la tasa de interés, las dificultades para el acceso al crédito, la dinamización del mercado y de la economía para poder rápidamente retomar la senda de crecimiento en el segundo semestre del año.
“Nosotros estamos concentrados en un proyecto industrial importante, en mejorar nuestras ventas de vehículos de varias categorías y en el lanzamiento de Montana, un modelo que yo creo va a llenar la expectativa de los consumidores. Tenemos la fe intacta de que el segundo semestre va a ser mejor de lo que hemos visto hasta ahora”, reiteró el directivo.
Para los próximos años la idea es seguir apostándoles a los vehículos eléctricos, en línea con su visión ‘Cero cero’, cuyo objetivo es lograr cero emisiones. Para finales de este año o principios del otro su meta es ampliar el portafolio de vehículos eléctricos.
Esta apuesta va de la mano con la educación para que los consumidores entiendan que el mercado del futuro son los vehículos eléctricos y que, según la mirada de Ángel Urdinola, “es una maravilla la tecnología que ya está presente en nuestro mercado, y que ojalá lo prueben, lo adquieran, lo traten, y eso va con un matrimonio inexorable que tiene que ver con las estaciones de carga, con los parqueaderos y el pico y placa –un tema que está exento por ley–”.
La regulación de este tipo de vehículos es otro de los aspectos que falta profundizar, y también ahondar entre los consumidores en las diferencias entre un vehículo cero emisiones y uno híbrido como pueden ser los Euro 6. “Creo que hay una necesidad regulatoria de empezar a diferenciar una tecnología de la otra, entendiendo que la más nueva es la tecnología eléctrica y es a la que ojalá, como país, le podamos dar todas las fuerzas en la medida que la apuesta nacional es tener 600.000 vehículos eléctricos para 2030”.
Ángel Urdinola señala que Colombia, frente a otros países de la región, ha evolucionado en la infraestructura para los vehículos eléctricos, liderando el tema con Chile y Brasil. Falta incrementar los incentivos al consumo, como bajar el arancel o dejarlo en cero, para traer este tipo de vehículos en grandes cantidades.
Esperan también que se mantengan estímulos en el IVA o del impoconsumo, para abaratar el costo de estos vehículos, y sostener diferenciadas las políticas de pico y placa, para buscar que el consumidor colombiano se involucre con la tecnología de cero emisiones.