Avianca, la mayor aerolínea nacional, no solo consolidó su posición de liderazgo en el sector. También dio un salto en el ranking de las empresas más grandes del país al ubicarse en el top 5 luego de haber ocupado el puesto 16 hace un año y el 36 en la anualidad anterior.
Parecería que los problemas que trajo la pandemia, la entrada y salida del Capítulo 11 y la fallida unión con Viva Air fueran sucesos que habrían ocurrido hace mucho tiempo. Pero la realidad es que, en menos de cuatro años, la aerolínea no solo se recuperó, sino que acaba de terminar un año con ingresos de más de 27 billones de pesos y utilidades por 224.000 millones.
El portugués Frederico Pedreira, quien desde enero es el CEO y presidente de Avianca, explica cómo llegaron a estos resultados y para dónde van de aquí en adelante.
SEMANA: ¿Cuál es su balance de 2023 y cómo va la empresa en 2024?
FREDERICO PEDREIRA: El 2023 fue el año en que confirmamos que nuestro modelo funciona. Hoy en día tenemos un producto flexible, que se adapta a todo tipo de necesidades y con precios más asequibles y competitivos. En resumen, le diría que la palabra de 2023 fue acceso, porque con todos los cambios lo que conseguimos fue que más personas volaran en avión; de hecho, un 16 % voló por primera vez con nosotros. Y las cifras lo demuestran: tuvimos el número de pasajeros más alto de nuestros 105 años de historia: 32,2 millones.
Además, abrimos 32 nuevas rutas, para un total de 147 en 75 destinos de 25 países. Nuestros indicadores operacionales estuvieron a la altura de las grandes aerolíneas del mundo, con una puntualidad de 85,7 %, lo que nos situó como la aerolínea global más puntual. Asimismo, alcanzamos uno de los índices de incidentes de maletas más bajos del mundo: 1,6 irregularidades en equipajes por cada 1.000 pasajeros, frente a un indicador de 6,9 de la industria, según datos de SITA al cierre de 2023. En 2024 nos enfocaremos en consolidar nuestro modelo y en ser la aerolínea elegida por nuestros viajeros. Por eso, estamos enfocados en proyectos de servicio, de tecnología y de conectividad para fortalecer aún más nuestra red.
SEMANA: En años anteriores, la inflación, el precio del dólar y el de los combustibles afectaban bastante la operación aérea. ¿Este año cómo les ha ido con esas variables?
F.P.: La inflación, la tasa de cambio y el precio del combustible son factores que forman parte del día a día del negocio y son externalidades que no controlamos. Sin embargo, hay costos que sí tienen cómo ajustarse y que también afectan directamente el precio de los tiquetes. Por ejemplo, las tasas aeroportuarias e impuestos.
Colombia es el segundo país de América Latina con mayor carga impositiva en el sector aeronáutico (de acuerdo con la IATA) y el quinto con las tasas aeroportuarias más altas (según ALTA). Para IATA hasta un 28 % del precio de los tiquetes en Colombia y hasta un 50 % en tiquetes internacionales corresponde a tasas e impuestos. Ahí hay una tarea por hacer; a menores impuestos, mayor acceso. Ahora bien, a pesar de la alta carga impositiva y gracias a la transformación de nuestro modelo, hemos conseguido mantener e incluso reducir el precio de los tiquetes. De hecho, según datos del Dane, el precio de los tiquetes aéreos en Colombia bajó un 9 % con respecto a 2022.
SEMANA: ¿La salida de aerolíneas de bajo costo ha implicado una mayor participación de mercado para aquellas con más tiempo como Avianca?
F.P.: La industria aérea, en general, creció, y particularmente Colombia tiene uno de los sectores aéreos más competidos de toda la región. Para que se haga una idea, en la actualidad, más de 25 aerolíneas operan en el país, de las cuales seis vuelan en el mercado doméstico. Durante el primer trimestre de 2024, el número de sillas disponibles en el mercado doméstico creció 39 % frente al mismo periodo del año pasado. En el internacional aumentó la capacidad de todo el mercado en un 23 %. Esto fue el resultado del crecimiento de los actores existentes sumado a la llegada de nuevas aerolíneas. Entonces, acá todos han crecido y el verdadero reto está en cómo atender lo desatendido y conectar a esa Colombia aislada. Gran parte de nuestro esfuerzo ha sido ese, y un claro ejemplo es la apuesta que hemos hecho por Ipiales, destino en el que, al cumplirse un año de la reactivación de la ruta directa a Bogotá, aumentamos a dos vuelos diarios nuestra operación, y consolidamos, además, la oferta a Pasto desde Bogotá y Cali.
SEMANA: ¿Qué planes de inversión tienen para este año?
F.P.: Nuestro compromiso con Colombia y América Latina se mantiene firme. Creemos que nuestro país tiene todo el potencial para ser un eje de conectividad de la región y referente de turismo. En Avianca estamos listos para seguir conectando más y mejor a las regiones, pero también a Colombia con el mundo. Este año abriremos alrededor de 15 rutas nuevas, dentro de las que se destacan Montreal y París, que regresó después de 20 años; aumentaremos la conectividad punto a punto y, además, reforzaremos rutas existentes con más frecuencias.
La materialización de estos planes se transforma en puestos de trabajo y contribuye al desarrollo económico de las regiones, mejorando su conectividad nacional e internacional. Asimismo, el foco estará en el servicio. Estamos trabajando en el desarrollo de nuestro modelo de atención al cliente, una iniciativa en la que queremos ser reconocidos no solo por entregar un buen producto, sino por cómo lo entregamos. También estamos invirtiendo en nuestros canales digitales para que la experiencia de las personas con Avianca sea más consistente, simple y amigable, mejorando la cadena de valor, desde la compra hasta el posvuelo.
SEMANA: Hay mucha preocupación por la caída del turismo en San Andrés. ¿Cómo lo ven ustedes?
F.P.: Sabemos que la isla nos necesita, y nosotros estamos haciendo nuestra parte, que consiste en volar. Por ejemplo, hemos enfocado nuestros esfuerzos en seguir conectando a San Andrés no solo con Bogotá, sino también con nuevos destinos, como Medellín y Cali. Hoy contamos con 56 frecuencias semanales (ocho vuelos diarios) entre San Andrés y Bogotá; 11 frecuencias a la semana entre San Andrés y Medellín (dos de ellas incrementales para esta temporada) y también siete frecuencias semanales a Cali (tres permanentes y cuatro estacionales) para garantizar que más personas puedan volar desde y hacia una isla que vive del turismo.
Solamente en el primer trimestre de 2024, en Avianca transportamos más de 260.000 pasajeros desde y hacia San Andrés. En ese sentido, creemos que reactivar el turismo de la isla es una tarea de todos y Avianca está firme. Queremos colaborar para que eso suceda.
SEMANA: Durante la pandemia y como medida de reactivación se redujo el IVA de los tiquetes aéreos de 19 a 5 % y luego se volvió a subir. ¿Qué tanto los afectó esta medida? ¿Creen que sea conveniente revivirla?
F.P.: Hay que empezar por reconocer que la reducción temporal del IVA fue una medida muy positiva que permitió que los colombianos viajaran más y a mejores precios.
Ya hemos vuelto al IVA anterior y, según la IATA, hoy los impuestos y las tasas llegan a pesar más de un 28 % en un pasaje doméstico y hasta un 50 % en uno internacional. De acuerdo con esta organización, Colombia es el segundo país con mayor carga impositiva en los tiquetes, solo después de Argentina y, según ALTA, Colombia es el quinto país con mayores tasas aeroportuarias, solo por detrás de Venezuela, Argentina, Ecuador y México. Consideramos que las iniciativas relacionadas con menores impuestos, como la reducción de IVA, la revisión de precios e impuestos al combustible y todas aquellas que estén enfocadas en aliviar la carga a los usuarios, son claves para garantizar que más personas puedan volar en avión.