Con el inicio de una nueva temporada escolar, llega de la mano la preocupación de muchos padres de familia que se quejan por las largas listas de útiles escolares y los elevados precios de los productos. De hecho, Fenalco estimó que el incremento de estos bienes podría ser de hasta 35 % la inflación del país, que recordemos cerró en 5,62 % para 2021.
Un reciente estudio internacional realizado por World Remit, una importante empresa británica de pagos transfronterizos, buscó determinar el costo real de la educación en 12 países, incluyendo Colombia, por medio de una extracción de datos que logró comparar el promedio de los precios de los materiales educativos básicos con los ingresos anuales promedio y las tasas de fertilidad.
Los resultados para el país demuestran los altos precios que tienen que afrontar los padres de familia. La data enseña que casi el 50 % de todos los hogares colombianos obtienen ingresos anuales de $20,984,000 (o menos), lo que equivaldría a $1,748,666.67 al mes. El costo aproximado por niño para su regreso al colegio es de $1,054,200 pesos y los hogares en Colombia tienen un promedio de dos niños.
Estos resultados equivalen a que en el país un hogar gasta una alarmante suma de dinero en útiles escolares: $2.255.960 o, en porcentaje, el 129 % de los ingresos de un mes.
A pesar de que muchos padres sueñan con brindarle una educación de calidad a sus hijos, los elevados costos que contemplan las matrículas, el transporte, la alimentación, los uniformes y, por supuesto, los útiles escolares, hacen que este panorama se aleje de ser una realidad.
El panorama internacional frente a Colombia
Una de las épocas del año con mayor volumen de remesas hacia América Latina es, primordialmente, las temporadas de ingreso escolar, por lo cual y según el estudio, mientras que en los Estados Unidos las compras para el regreso a clases representan el 6 % de los ingresos mensuales de un hogar y en México el 51 % o más, en Colombia esta cifra está por las nubes.
Es de resaltar que, según una reciente Encuesta de Expectativas del Consumidor (CES), la educación es una de las razones principales por las que inmigrantes envían dinero a sus países de origen en aras de apoyar este derecho fundamental.
Alrededor de 244 millones de personas son catalogadas como inmigrantes en todo el mundo, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas, el Parlamento del Reino Unido y la Oficina de Estadística australiana, representan un amplio porcentaje de la población total en países como Estados Unidos (14,4 %), Reino Unido (14 %), Australia (30 %) y Canadá (21,9 %).
En dichos países, donde los ingresos familiares medios se encuentran entre los más altos del mundo, los inmigrantes y los trabajadores extranjeros se ven inmersos en el mundo laboral para mantenerse a sí mismos y, al mismo tiempo, a sus familias en sus países de origen.
Sin embargo, los colombianos no son ajenos a este panorama, pues millones de connacionales que viven en el exterior pueden darle una mano a sus familias a través de remesas que les permitan garantizar el regreso de los niños a clases.
“Durante el particularmente difícil último año y medio, hemos visto cómo los colombianos que viven en el exterior no han abandonado a sus seres queridos en Colombia, y se espera que esta tendencia continúe durante la temporada de regreso a clases, ya que la educación ha sido históricamente una de las principales razones por las que las remesas se envían a casa”, afirmó Jorge Godínez Reyes, director para Latinoamérica de WorldRemit en un comunicado.
Si bien los costos de algunos bienes educativos primordiales continúan en aumento, la educación se ha convertido en un aspecto fundamental para las familiar colombianas que buscan hacer todo lo posible por defender este derecho básico.