En Colombia, durante julio, el comportamiento de la inflación ya refleja la salida de los ciudadanos a demandar el corrientazo y otros bienes y servicios que, en igual mes de 2020, estaban quietos o con bajo dinamismo.
La inflación anual en el séptimo mes del año se ubicó en 3,97%, en contraste con la registrada en igual periodo del año pasado, cuando fue de 1,97%.
Individualmente, en julio, la inflación fue de 0,32%, lo que supera 8 veces el promedio de las expectativas que tenían los analistas para este mes, según la encuesta del Banco de la República, en donde los rangos estimados iban entre (-0,35%) y 0,26%).
Dentro de las divisiones que mide el Dane, la única que tuvo un resultado negativo en el mes fue Información y comunicaciones (-0,11%), lo que se debió a los descuentos que activaron las compañías relacionadas con esa rama de la economía.
En lo que va corrido del año, el Índice de Precios al Consumidor registra una variación de 3,47%, lo que supera casi tres veces el número del 2020: 1,12%.
El director del Dane, Juan Daniel Oviedo, destacó que en julio, la inflación mensual estuvo impulsada por la división de restaurantes y hoteles, que fue la que tuvo la mayor variación: 0,80%, seguida de alimentos y bebidas (0,38%) y entretenimiento (0,38%). Este es el reflejo del retorno a las oficinas y a las actividades productivas, luego de la aplicación de la estrategia paulatina de reactivación económica. Las personas necesitan comer fuera del hogar.
Los alimentos revelan realidades
Dentro del componente de alimentos se destaca el caso de los huevos, que registraron el mayor incremento en los precios dentro de este grupo, con una variación de 4,22%, lo que tiene coherencia con la reducción de la oferta de este producto, luego de los hechos ocurridos en el sur del país, durante el paro nacional, que frenaba el flujo normal del transporte de este alimento. Departamentos como Valle son grandes productores de huevos.
De acuerdo con los datos entregados por el Dane, los aceites comestibles se ubicaron en el segundo lugar, con la variación más alta después de los huevos, al registrar 3,75%. La carne de aves, con una inflación de 2,20%, también mostró un impulso inflacionario. La explicación de este comportamiento es que se trata de productos que están muy conectados con insumos importados, por lo cual, el dólar les pega de manera importante.
En contraste, entre los alimentos que tuvieron aportes negativos a la variación fueron: papas (-10,68%), cebolla (-14,67%), arroz (-1,77%), plátanos (-4,57%) y tomate (-5,71%). Esto se debe a una mayor disponibilidad de ellos en las plazas de mercado.
Por ciudades
Según las estadísticas presentadas este jueves por el Dane, la ciudad con los precios más altos fue Santa Marta, con una inflación de 0,71% en el mes, mientras que la que registró la variación más baja fue Florencia (-0,04%) y Popayán (-0,28%).
En la capital del país, el Índice de Precios al Consumidor se ubicó en 0,32%.
De acuerdo con lo explicado por Oviedo, en el caso de Santa Marta, el indicador fue impulsado por los precios de los arriendos, que tuvieron una variación en los precios de 1,07%.
Reacciones
Los analistas en el país mostraron su sorpresa ante los resultados. Según expertos del BBVA, “la inflación en julio sorprendió por tercer mes consecutivo al alza”.
El incremento en los precios de los alimentos, según BBVA, se continúa reflejando en las comidas para consumo fuera del hogar, que registraron la variación mensual más alta del mes”.
La expectativa de BBVA es que la “la inflación se mantendría alta en lo que resta del año y cerraría el mismo por encima del rango esperado por el Emisor”.