Expertos en economía aseguran que el aumento del costo de vida, efecto postpandemia y la guerra en Ucrania son algunos de los factores que han incidido en que las monedas locales, como por ejemplo en Colombia, pierdan su poder adquisitivo.
Según el Departamento Administrativo de Estadísticas (DANE), en Colombia la inflación durante los últimos 12 meses quedó en 13,25 %. Los alimentos fue la división que más jalonó el crecimiento de este indicador, lo que quiere decir que ahora los colombianos pagan más por adquirir los productos básicos de la canasta familiar. En este orden de ideas, la plata cada vez alcanza menos y los ingresos no aumentan; lo que obliga al ciudadano a dejar de invertir y a gastar sus ahorros.
Sin embargo, expertos en finanzas aseguran que la mejor y más segura opción para invertir en épocas de alta inflación es en el sector inmobiliario y los bienes raíces en Estados Unidos, teniendo en cuenta además el alto precio del dólar actualmente.
De acuerdo con los reportes de apertura de la Bolsa de Valores de Colombia, esta el dólar arrancó con un precio de apertura, de este viernes 24 de febrero, de 4.880 pesos, el cual marca un repunte de casi 30 pesos respecto a la Tasa Representativa del Mercado fijada para hoy por la Superintendencia Financiera en 4.853 pesos con 90 centavos.
“En el año 2008 en Miami podíamos comprar un apartamento de 150 mil dólares, que equivalían a unos 300 millones de pesos, al día de hoy con la revaluación del dólar representarían 700 millones de pesos, reflejando una ganancia considerable; pero no solo eso pues la misma vivienda que en 2008 costaba 150 mil dólares, hoy está avaluada en 400 mil dólares, lo que nos daría una inversión de retorno del casi 530%”, así lo explica Juan Manuel Matallana CEO de Miami Partners Development.
Así mismo, advierten que en momentos de volatilidad y crisis económica lo mejor es hacer operaciones en monedas sólidas y fuertes como el dólar y en países con larga trayectoria en materia de estabilidad económica como es el caso de Estados Unidos.
Además las proyecciones apuntan a que por lo menos tres partes del globo terráqueo entran en crisis este año y la única que se prevé no entre en una situación aguda es justamente el país norteamericano.
Por su parte uno de los estados con mayor confianza inversionista es La Florida, “a esta zona de Estados Unidos le están llegando parte de las riquezas del mundo y se está comparando con Dubái, en cuanto al indicador del ingreso de riqueza e independencia económica. Además es el primer estado con mayor migración de Estados Unidos, estimando un arribo de 1.219 personas que llegan a vivir a la Florida diariamente y no se pagan impuestos estatales”, asegura Matallana.
Aunque unas de las acciones fuertes de los Bancos Centrales es el aumento de las tasas de interés para contrarrestar la inflación, las tasas en el sector inmobiliario no tienen tanta variabilidad e incluso al día de hoy están casi equiparadas a lo que estaban hace cinco años, factor que da tranquilidad a los que deseen invertir en este sector.
De igual manera los que piensen invertir en bienes inmuebles en la Florida tienen mayor facilidad de venderlos o arrendarlos en menor tiempo, pues actualmente la oferta de finca raíz no es muy amplia, teniendo en cuenta que de los años 2020 a 2022 la construcción en el país se redujo considerablemente por la pandemia y segundo por la falta de elementos de construcción durante esos años. Sin embargo el mercado está en crecimiento acelerado y se estima que en los próximos meses se construyan y entreguen cerca de 920 mil propiedades nuevas.
La Florida se convirtió además en el estado con mayor índice de valorización de vivienda con 18.7% en 2022. “Es así como una inversión segura y con un retorno altamente rentable es la finca raíz, la fórmula ganadora es la compra de un lote, la consecución de los respectivos permisos, la construcción y la posterior venta de la edificación o bien inmueble.
Al estar en real estate se le gana la batalla a la inflación porque con el aumento del costo de vida el dinero se devalúa o pierde poder adquisitivo, mientras que la finca raíz por el contrario siempre se revalúa y no pierde poder adquisitivo; así el sector sufra crisis esporádicas como la de 2008. Desde hace 40 años el sector venía escalando positivamente y desde hace 10 años recuperó lo que cayó en 2008 y no solo volvió a consolidarse en los niveles de ese momento sino que superó la tendencia al alza en la que venía.