Después de estar al borde del abismo, el Fondo de Financiamiento de la Infraestructura Educativa (FFIE) acaba de recibir una buena noticia: su rescate está prácticamente listo. Un acuerdo sellado entre los gobernadores del país y el Ministerio de Educación Nacional que contará con el apoyo técnico de la Federación Nacional de Departamentos, le acaba de dar un nuevo aire a este fondo. La decisión se adoptó en el marco de una asamblea extraordinaria de gobernadores que contó con la participación de la ministra de Educación, María Victoria Angulo, y durante la cual los gobernadores se comprometieron a impulsar el rescate del Fondo. Le recomendamos: Gobierno alista ajustes a infraestructura educativa La consigna de los mandatarios regionales es rescatar los proyectos que se encuentran al borde del siniestro, luego de que varios de los más importantes se quedaran a mitad de camino. De acuerdo con cifras que el propio fondo había reportado en febrero pasado, 7 de cada 10 proyectos estaban en riesgo medio o alto de incumplimiento. Para rescatar esta entidad, los gobernadores contarán también con el respaldo del Ministerio de Educación Nacional que ha confirmado su compromiso “con el cumplimiento a cabalidad de todos los proyectos de infraestructura en beneficio de los niños y jóvenes que se forman en el ámbito de la educación pública”, según informaron a través de un comunicado los gobernadores. El FFIE se había planteado entre sus metas completar la construcción de 266 Instituciones Educativas, pero hasta ahora solo se han entregado 10 obras, es decir apenas un 3,77%, otras 61 obras están terminadas (representan el 23,01%) y las demás construcciones se encuentran a medio camino. Entre las obras inconclusas un 10,56% están apenas en etapa de diseño; un 4,9 por ciento en suscripción; el 12,45% cuentan con licencia expedida; otro 43,39% están en otra y el 1,88% en trámite de licencia. Con la suscripción del acuerdo entre los gobernadores y el Ministerio de Educación habrá algunos cambios de fondo para garantizar que las obras puedan salir adelante. Uno de estos cambios tiene que ver con la reestructuración de la entidad, que ya está contemplada en el nuevo marco normativo creado a instancias del Plan Nacional de Desarrollo. Pero también está previsto que ahora las entidades territoriales tengan un asiento en la nueva junta directiva del Fondo. Entre las medidas que están siendo estudiadas en mesas técnicas se contempla la de exigir a los contratistas, de manera perentoria, que aceleren y cumplan con la ejecución de las obras, a punto de convertirse en “elefantes blancos”, u obligarlos a que las cedan. También queda en estudio la posibilidad de liquidarlos. Los gobernadores de Valle del Cauca, Risaralda y Caldas, propusieron que se adopten medidas urgentes para enfrentar la coyuntura crítica por la que pasa este fondo, pues además de las dificultades para sacar adelante las obras, su director, Juan Carlos Franco, renunció hace una semana. Le puede interesar: Fondo de Infraestructura Educativa se queda sin gerente en un momento crítico En la nueva junta directiva tendrán representación las entidades que defienden los intereses territoriales: la Federación Nacional de Departamentos la Federación Colombiana de Municipios y la Asociación de Ciudades Capitales. Durante la asamblea extraordinaria, los gobernadores conocieron la propuesta para la reforma integral al “Banco de Excelencia”, propuesta que contempla que las entidades territoriales conservarán la facultad nominadora desde el proceso de inscripción hasta el nombramiento. Ya quedó definido que los departamentos de Quindío, Boyacá, Bolívar y Arauca serán los primeros en iniciar un plan piloto con las modificaciones propuestas, ejercicio que luego de cumplir mes y medio en ejecución, consolidará los resultados de su aplicación para la mejora del “Banco de Excelencia”. Aunque hasta el momento no se conocen los detalles del rescate, este exigirá invertir nuevos recursos en el FFIE para sacar adelante las obras. De acuerdo con el anterior director del Fondo, hasta el momento se le han invertido $3,28 billones, y los gobiernos locales habían aportado $1,2 billones para cofinanciar nuevas aulas. Por eso la decisión de los gobernadores resulta fundamental pues es una muestra de confianza que muchos esperan que se materialice en la construcción de las aulas escolares que requiere el país.