Las opciones para conseguir nuevos recursos fiscales se están agotando y la comisión de ponentes, que trabaja con el equipo económico del gobierno, se está quedando cada vez con menos alternativas. Esta es la sensación general que se respira hoy, cuando algunas de las propuestas que fueron incorporadas ayer por los congresistas, para conseguir los 14 billones de pesos en la Ley de Financiamiento, empiezan a tambalear. La ponencia definida anoche incluía ocho propuestas que generarían 13,7 billones de pesos: cambios en renta a personas naturales, con unificación de cédulas y mayores tarifas marginales; un impuesto para quienes tengan patrimonios líquidos superiores a 5.000 millones de pesos; un IVA plurifásico (en varias etapas de la cadena de distribución) a cervezas y gaseosas; aumento en la tarifa para los dividendos y los giros de utilidades al exterior; normalización tributaria para capitales en el exterior; limitación del descuento en la tarifa del IVA al 90 por ciento y no al 100 por ciento como hasta el momento; una sobretasa de 5 puntos en la tarifa de renta para los sectores financieros y un aumento del 2 por ciento para la venta de vivienda de más de 918 millones de pesos. En el papel, estos cambios le permitían al fisco recaudar 13,7 billones de pesos. Consulte: Ley de financiamiento se queda sin 6 billones de IVA y se vuelve a rebarajar Pero las cosas cambiaron radicalmente hoy. Aunque estaba previsto completar la ponencia con la incorporación de las propuestas sobre renta de personas jurídicas, tras una nueva revisión, el gobierno y algunos congresistas de oposición se mostraron inconformes con varias de las iniciativas incorporadas, que buscan conseguir nuevos recursos para financiar el presupuesto del próximo año. Y comenzaron a caerse algunas de las propuestas que más recursos generarían. Esto implica que ya no se conseguirán los 14 billones de pesos que necesitaba el gobierno para el próximo año, que solo se obtendría la mitad y que habrá que hacer un ajuste importante en el gasto público, en el cual no se descartan algunos programas sociales. Por eso, ya hay quienes creen que de seguir así, esta sería una reforma insustancial. Luego de una reunión convocada en horas de la mañana de este martes para dar a conocer los puntos acordados por una comisión de ponentes, el malestar fue evidente y comenzaron a aparecer las voces de rechazo a las propuestas. Estas no solo provienen de congresistas de la oposición, sino del equipo económico del gobierno que se ha opuesto a varias de ellas por considerarlas inconvenientes. Ayer en la tarde el equipo económico había insistido en que era prematuro hablar de que tenían una ponencia lista, pues ha dicho que hasta que esté totalmente concertada, esta sigue con cambios. En su exposición de esta mañana, el gobierno advirtió que era inconveniente reducir la deducibilidad del IVA al 90 por ciento (estaba en el 100 por ciento) porque se incumpliría la decisión 599 de la Comunidad Andina de Naciones, CAN, que establece el margen de deducibilidad de este gravamen en el 100 por ciento. Por su parte Katherin Miranda, del Partido Verde, denunció que esta propuesta incorporada ‘un mico’ que le podría resultar mucho más costoso a los colombianos. Según la representante Miranda, “nos iban a aumentar precios en 1,2 por ciento y tendríamos entonces un gravamen de IVA del 32 por ciento, lo que afectaría bienes que hoy están exentos como leche, huevos, carne y eso golpearía a los pequeños productores y al bolsillo de los colombianos”. Hacia media mañana ya esta propuesta estaba por fuera de la ponencia pero su salida dejó un hueco de 6 billones de pesos, cifra en que fue calculada por el equipo de gobierno la generación de recursos de esta reducción en la deducibilidad del IVA. En contexto: Ley de Financiamiento, se espera este miércoles el documento final Pero no es la única propuesta que estaría por fuera. El gobierno tampoco está de acuerdo con crear una sobretasa en renta para el sector financiero porque se trata de una medida discriminatoria y que podría afectar el funcionamiento de esta actividad, y anunció que revisará nuevamente las cifras para que los ponentes conozcan las cargas que hoy pesan sobre este sector. La propuesta quedó entonces en el congelador, a la espera de que surjan nuevas propuestas o nuevas cifras, pero en esencia busca subir 5 puntos el impuesto de renta a las entidades bancarias, lo que significaría que en 2019, cuando todas las empresas paguen 33 por ciento de renta, en el caso de las entidades financieras estaría en 38 por ciento. ¿Qué opciones quedan para conseguir los recursos? Aunque algunos congresistas mantienen el optimismo por alcanzar con esta Ley de Financiamiento una cifra cercana a la que aspiraba el gobierno, de 14 billones de pesos, ya hay quienes creen que es hora de resignarse. Katherine Miranda, del Partido Verde, ha dicho que se llegó el momento de decirle no a la cifra de 14 billones de pesos si siguen apareciendo propuestas que generen cargas más gravosas para los colombianos. Esto implicaría que se podría llegar a máximo 6 o 7 billones de pesos, considera la congresista. Para Richard Aguilar, el senador de Cambio Radical, hasta la fecha se ha identiricado un recaudo de 7 billones de pesos, pero anunció que “revisaremos proposiciones para mejorar el gestión de la Dian, lo cual podría representar 2 billones de pesos adicionales”. Sin embargo, reconoció que parece inminente que sea necesario un ajuste presupuestal para el próximo año. El presidente de la Comisión Tercera de la Cámara, Óscar Darío Pérez, dijo por su parte a la cadena radial RCN que ya el Congreso estaba llegando a un punto en que las opciones de obtener nuevos recaudos parecen agotarse. ¿Hora de los recortes? En momentos en que se agotan las fuentes de ingresos para el fisco, hay quienes plantean que llegó la hora de hacer recortes del lado del gasto, pues es claro que el gobierno no logrará los 14 billones de pesos que necesita para financiar varios proyectos sociales, entre ellos los giros para la salud, educación y los subsidios a la energía para familias de escasos recursos, entre otros. Esto ha llevado a expertos a plantear si no es hora de que el gobierno muestre una voluntad clara de que también por el lado del gasto se pueden hacer recortes importantes. “La insaciable voracidad del gasto y endeudamiento público se han ido comiendo las fuentes de financiación” aseguró un experto, quien sostuvo que este es el momento para que el gobierno muestre sus cartas de qué está planeando hacer para reducir para reducir los gastos, tener mejores medidas antievasión y antielusión y administrar de una manera más eficiente los recursos fiscales del país. Las propuestas continuarán en la mesa de ponentes y gobierno pues se espera que a más tardar ya esté lista la ponencia definitiva, que será radicada en horas de la mañana en el Congreso de la República, para comenzar el llamado a votación. Un día después, es decir el jueves, podría iniciar la votación de la ponencia definitiva.