La necesidad de obtener dinero rápido y fácil ha sido una constante durante la pandemia, que ha dejado sin empleo y en difíciles condiciones económicas a miles de personas en el país.

De hecho, de acuerdo con el Dane, en noviembre este indicador subió al 13% y con la pandemia en medio de su segundo pico, hay mucha incertidumbre sobre el futuro económico y una pronta reactivación del tejido empresarial.

Frente a este panorama, son cada vez más los colombianos que han recurrido a las fintech y créditos online para obtener dinero rápidamente para tener solvencia económica por unos meses mientras pueden estabilizar sus situación económica.

Según el presidente de la fintech Rapicrédit, Daniel Materón, hoy en día reciben cerca de 60.000 solicitudes de crédito, lo que ha aumentado considerablemente durante los meses de pandemia.

Saber que nos hemos convertido en un apoyo para los colombianos es muy gratificante y más cuando nuestros productos sirven como un impulsor de sus proyectos o una solución a sus urgencias”, comentó Materón.

Pero, ¿Qué destino le dan los colombianos a estos créditos que obtienen en línea?

De acuerdo con lo reportado por Rapicrédit, cerca del 37% del dinero desembolsado es invertido en negocios, 25% para pagar deudas, 12% para pagar deudas médicas y otro 12% para pagos de servicios y gastos familiares.

Una de las principales razones por las cuales las personas acuden a este tipo de créditos en línea tiene mucha relación con la falta de bancarización de los usuarios, quienes en su mayoría nunca han tenido una tarjeta de crédito o una cuenta de ahorros, algunos de ellos ni siquiera han tenido contacto alguno con una entidad bancaria.

Por otra parte, no contar con el perfil de riesgo exigido por las regulaciones vigentes para obtener créditos en bancos ha incentivado a las personas a buscar formas diferentes de financiación.

Algunos usuarios de este tipo de créditos también los usan porque han sido reportados antes en una central de riesgo y por ello no son bien vistos por las entidades bancarias, que les niegan los créditos u otro tipo de ayudas.

La falta de bancarización, los perfiles de riesgo y los reportes negativos en las centrales de riesgo son algunas de las razones por las cuales las personas acuden a los créditos online para recibir apoyo financiero rápidamente.

De acuerdo con un reporte entregado por la Superintendencia Financiera, estas tecnologías financieras han tenido gran acogida en la sociedad colombiana (76%), el más alto en América Latina, e incluso superior a países como Singapur con 67% y Reino Unido con 71%.

En el tema de los créditos en línea hay una preocupación recurrente de las personas y es la seguridad que dan, teniendo en cuenta que se comparten los datos personales a través de la plataforma y en algunos casos hay estafas, entre otros problemas propios de la virtualidad.

En este sentido, Rapicrédit hace “una verificación de la información ingresada por el usuario para validar contra el Buró de crédito y los datos de la Registraduría Nacional el porcentaje de exactitud y completitud del número de identidad y su correlación con nombres y apellidos”, explicó Materón.

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El análisis de comportamientos también ha permitido que se creen alertas tempranas por movimientos inusuales; es decir, la creación de un histórico de actividades de los usuarios basada en modelos Machine Learning posibilita la plena identificación de acciones habituales de los usuarios, cualquier cambio será detectado y la amenaza será eliminada de raíz, mucho antes del ataque cibernético.

“En caso de encontrar inconsistencias entre el nombre y la identidad, se pone la solicitud en estudio y se contacta al cliente para que proporcione información adicional que permita al equipo de servicio al cliente validar su identidad y corregir los datos que estén incorrectos. Si pasados dos mensajes de recordación no se recibe respuesta del usuario en un lapso de 3 días hábiles, la solicitud es rechazada y se marca para estudio por parte del equipo de TI para análisis de patrones sospechosos”, afirmó Materón.