En el país, los ciudadanos ven pasar los días y los meses de la presente administración y la percepción es que todas esas necesidades en materia de infraestructura, que han estado en boga desde hace tiempo, parecen no avanzar y convertirse en obras de beneficio para las poblaciones.
En cambio, lo que sí anda con dinamismo es el cobro. Los peajes aumentan y la valorización por tener cerca una vía 4G, que ya se hizo, se vendrá encima.
Con esas prerrogativas, durante un foro de infraestructura y construcción, la ministra de Transporte, María Constanza García, sacó las cartas de la hoja de ruta por la que tendrán que evaluar al Gobierno al finalizar el período, y aclaró varios de los puntos que han sido más controversiales en el país.
Una vez más, la funcionaria repitió el mantra en el que ha insistido el Gobierno a través de varios de sus voceros: “La inversión en infraestructura ha estado concentrada en el centro del país”, lo que coincide con la pobreza, pues donde menos hay conectividad, se incrementan las dificultades socioeconómicas de la población.
Coca versus otros productos
Esa realidad de la conectividad en el país, que se pretende atacar con el desarrollo de vías terciarias y secundarias, afecta duramente al pequeño productor, al que le resulta muy difícil sacar sus productos. En el caso de las zonas cocaleras, impacta aún más.
“Una tonelada de hoja de coca la convierten en 2 kilos de producto y la sacan en un morral. Con otro producto, si no hay una infraestructura adecuada, cuando llega el productor con la carga al sitio de comercialización, ya ha perdido la mitad, porque el producto ya no estaría en buenas condiciones para ser adquirido por el consumidor”.
¿Hay que expandir o modernizar?
En su exposición, la ministra de Transporte puso sobre el tapete la variedad de modos de transporte, por lo cual lanzó la pregunta de si en todos los casos hay necesidad de expandir o simplemente invertir para modernizar. Así, puso el caso de los puertos, por los cuales el año pasado pasaron 175 millones de toneladas de carga, mientras hay capacidad para 400 millones de toneladas. En tal circunstancia, no se necesitaría expandir, sino modernizar, dijo la funcionaria.
De igual manera, en relación con el modo de transporte aéreo, del cual, aunque dijo que no se trata de tener aeropuertos para que digan que este es un país moderno, destacó la evolución en este segmento: el año pasado se incrementó en 2,9 % y en lo corrido de este año ha aumentado en 16 %.
Para este componente, de acuerdo con lo expuesto por García, se vienen dinamizando inversiones, de manera que en 2030 se llegue a movilizar 100 millones de pasajeros, “casi el doble de lo que tenemos actualmente”, destacó.
Lo que está mal
El talón de Aquiles de la infraestructura, según la ministra de Transporte, parece ser el mantenimiento, como lo ha evidenciado la afectación que tiene cada vez que hay un fenómeno climático. En ese sentido, puso como ejemplo las más de 4.500 emergencias en carreteras que ha habido y que hoy tienen cerradas importantes vías como la de Cusiana o la de La Soberanía, que conecta a Saravena, Arauca, con otros centros poblados de Norte de Santander.
“Más que dobles calzadas, que son importantes, hay que poner el foco en lo que es prioritario”, dijo García, al señalar que el 90 % de vías terciarias están en mal estado, o que hay 9 zonas portuarias en amenaza media por elevación del nivel del mar. “Es en esas líneas en las que hay que movilizar inversiones y tener en cuenta que el río es 50 % más barato que el camión, el tren es 25 % más barato que el camión”, indicó.
Con la economía popular
Hacer obras de infraestructura de la mano con las cooperativas es algo que ha sonado en Colombia como poco probable, pues se trata de billonarias inversiones que, además, requieren experticia.
Al respecto, la ministra dijo que no se trata de hacer puertos, aeropuertos, viaductos y dobles calzadas con las juntas de acción comunal, sino de volverlos socios, “construyendo placa huella, construyendo alcantarillas, obras que son de baja complejidad”.
García mencionó que, si bien el sector transporte es el que más plata mueve para la inversión, en la actualidad “estamos al límite con inversiones, los cupos de endeudamiento están copados”, agregó.
Lo cierto es que la infraestructura es uno de los pilares del desarrollo de un país, pues toca la competitividad de todos los sectores y, en general, ha habido mucho tilín, tilín y...