Las noticias sobre la efectividad de la vacuna contra la covid-19 tenían esperanzado al mundo, pero ahora asalta una nueva preocupación. A la par con una aprobación de vacunas y la esperanza de inicio de la vacunación masiva, aparece una nueva cepa del virus que ha puesto de rodillas a la humanidad.
La sensación que crea la noticia es que se está dando un giro de 360 grados, es decir, vuelve a quedar todo en el punto de partida y los seres humanos se encuentran protagonizando una ‘pesadilla sin fin’.
Si bien hay muchos aprendizajes de la pandemia, en términos de la vacuna podría haber algunos inconvenientes, pues se trata de millonarias inversiones con las cuales se intenta proteger a miles de millones de vidas en el mundo.
Nada está resuelto todavía en relación con la nueva cepa del coronavirus. Se habla de una menor mortalidad, pero de una mayor facilidad para el contagio. Aún están pendientes las palabras de los científicos acerca de si proteger a la población mundial con la anterior cepa, la más agresiva, tendrá algún efecto en la etapa que comienza y que está llevando a los países a cerrar fronteras para vuelos, principalmente de Reino Unido, donde fue detectada la nueva cepa.
Mientras tanto, así van las cuentas de las inversiones en la vacuna, con la cual el mundo ya pensaba que había llegado al tramo final del túnel.
La carga económica para crear y probar la vacuna, que se ha hecho en tiempo récord debido a la urgencia que plantea la pandemia, ha sido llevada en hombros con dinero de los gobiernos, de las donaciones hechas por millonarios y fundaciones, y por inversiones propias de las empresas que están embarcadas en la tarea.
Según sumatoria de la reciente información de Airfinity, firma que suministra datos para inversores, van cerca de 14.000 millones de dólares (13,9 millones), es decir, unos 48 billones de pesos en un proceso de elaboración de la vacuna, durante los últimos 9 meses.
La mayor parte de los recursos han sido puestos por los gobiernos: 8.600 millones de dólares, mientras que la participación de donantes, a través de organizaciones sin ánimo de lucro suma 1.900 millones de dólares.
Es decir, las empresas que directamente avanzan en la investigación, producción y prueba de la vacuna estarían aportando una inversión de 3.400 millones de dólares, la mayoría de los cuales provenientes de la financiación externa.
Estas cuentas están ligadas a 8 vacunas, entre ellas las más avanzadas hasta el momento: AstraZeneca (vacuna de Oxford), Pfizer (vacuna que se trabaja con BioNTech), la vacuna de Johnson & Johnson, la Moderna, la de Sanofi con GlaxoSmithKline, la de Sanofi con TraslateBio, la de Novavax y la de Curevax.
Más de 40 millones de casos totales en el planeta y más de 1 millón de muertes ameritan la carrera que ahora se ve salpicada por un nuevo nubarrón, una cepa distinta a la de la vacuna.
¿Cómo va Colombia?
Recientemente, el Ministerio de Hacienda emitió una resolución mediante la cual disponía 437.188 millones de pesos del Fondo de Mitigación de Emergencias (FOME) para adquirir dosis de vacunas a Pfizer.
También se tuvo el anuncio de compra de 20 millones de dosis de la vacuna a través del mecanismo Covax, de la OMS. Este lunes, el presidente Iván Duque y el ministro de Salud, Fernando Ruiz, hablaron de un total de 40 millones de dosis en Colombia que empezarán a aplicarse desde febrero (1,7 millones inicialmente), para inmunizar en total a 20 millones de personas, teniendo en cuenta que el biológico requiere dos dosis por individuo.
El Senado de la República aprobó ya el proyecto de ley de inmunización para la población colombiana contra la covid-19, declarando la vacuna como un interés general, lo que establece que será la Nación la encargada de adquirir las vacunas y aplicarlas en la población. Esto implica que se trata de un gasto prioritario, el cual, en total, ya estaría sobrepasando los 1,4 billones de pesos.
Cifras sin precedentes
El gasto en vacunas es apenas uno de los impactos del coronavirus. El efecto de las vidas perdidas es algo que no se ha cuantificado aún. En Colombia, van 1,5 millones de casos de covid-19, pandemia a la que se le atribuyen 40.000 muertes, 90.000 casos activos y 1,4 millones de personas recuperadas, según cifras oficiales del 20 de diciembre de 2020.
Los países del mundo, al igual que Colombia, han adquirido deudas sin precedentes para tratar de enfrentar la coyuntura de una situación sanitaria que llegó de manera inesperada y extrapoló hasta ser una de las crisis sociales y económicas más agudas en las últimas décadas.