En medio de los azares provocados por varias renuncias imprevistas y reemplazos forzosos, así como por el mandato constitucional que le permite nombrar este año dos codirectores de la junta directiva del Banco de la República, el Gobierno está a punto de consolidar allí sus mayorías.

Esto ha desatado una agria polémica justo en vísperas de la celebración de los 30 años desde que la Constitución de 1991 consagró la autonomía de esta entidad. Y su independencia del Gobierno.

Se trata sin duda de una gran paradoja. Con solo dos años y medio en el cargo, el presidente Iván Duque podría completar la elección de cuatro de los cinco codirectores de la junta, de la que forman parte también el gerente del Emisor y el ministro de Hacienda.

Se trata de un caso excepcional para un Gobierno que solo tendrá un periodo de cuatro años. Según la Constitución de 1991, cada administración tiene la posibilidad de nombrar solo a dos codirectores para garantizar la independencia. Sin embargo, las renuncias en septiembre de 2019 de Juan Pablo Zárate y en enero de 2020 de José Antonio Ocampo le permitieron al presidente Duque reemplazar los dos primeros cargos.

A estos se suman los dos autorizados por la Constitución y que anunciaría en los próximos días. Eso le permitiría tener la ‘inmensa mayoría’ en la junta. Incluso, se habla de un nombramiento adicional, ya que en las últimas semanas ha crecido el rumor de que una de las codirectoras planea renunciar. En ese caso, serían cinco codirectores elegidos por este Gobierno, más el ministro de Hacienda. Eso, por supuesto, no tiene contentos a quienes defienden a capa y espada la independencia del Banco, y ven en estas múltiples designaciones una amenaza a su autonomía.

josé antonio ocampo Exministro y profesor de Columbia | Foto: Juan Carlos Sierra

El exministro y excodirector del Banco de la República, José Antonio Ocampo, le pidió al Gobierno abstenerse de los nombramientos que permite la Constitución, pues ya efectuó dos cambios. Según su argumento, resulta inapropiado que nombre cuatro o más codirectores, pues iría en contravía de lo que buscó la Constitución. Esto pondría en riesgo ese mandato constitucional, dice.

Sin embargo, hay quienes aseguran que la clave para garantizar la independencia está en la elección de personas idóneas que, como lo ordena la Constitución, “representen exclusivamente el interés de la Nación”. No de un Gobierno. Esta incluso ha sido una tradición entre los codirectores del Emisor.

Los temores no son nuevos. Durante los mandatos de Álvaro Uribe y Juan Manuel Santos, quienes fueron reelegidos y estuvieron ocho años en el poder, cada uno nombró cuatro codirectores e, incluso, se afirma, incidieron de alguna manera en la elección de los gerentes. Pero eso no generó ningún tipo de interferencia en las decisiones que tomaron los integrantes de la junta, que mantuvieron su independencia. Sin embargo, la polémica está encendida de nuevo.

Si bien no se trata de un tema jurídico, hay quienes temen que se vea amenazada la independencia del Banco con un gobierno que en un solo periodo, ya ha reemplazado a dos codirectores, este mes podría nombrar otros dos y tiene además en la junta al Ministro de Hacienda. Algunos creen que el Gobierno está en su derecho, pero otros consideran inconvenientes los nuevos nombramientos.

Más allá de la controversia, quizás lo importante será lograr que las designaciones recaigan en personas idóneas, que garanticen la independencia. Eso daría la tranquilidad que el país económico y la Constitución necesitan.