La madeja del presupuesto 2024 sigue enredada. A la ya delicada situación que se presenta, debido a la inconsistencia en el decreto de liquidación de la carta financiera (es decir, la desagregación que por ley debe hacer el Ministerio de Hacienda, para decir en qué se gastará cada peso), ahora surge otro ‘gallo’.
Según el exministro de Hacienda Juan Camilo Restrepo, quien ha venido alertando sobre la gravedad de la situación que se presenta con el Presupuesto 2024, ahora intentan renegociar vigencias futuras, que no son otra cosas que recursos comprometidos a largo plazo.
El enredo, que parte del detalle, según el cual, se dejaron 13 billones de pesos en el aire, sin decir concretamente en qué se van a invertir, pues son del ya escaso rubro de inversión, uno de los tres componentes del Presupuesto general (los otros dos son gastos de funcionamiento y pago de la deuda).
Según las normas orgánicas del presupuesto, hasta el 31 de diciembre del año en que el Congreso de la República aprueba el proyecto de ley (lo que se hace en octubre), el Ejecutivo debe presentar el decreto de liquidación con su respectivo anexo. Pues bien, en esta oportunidad se presentó el anexo, pero incompleto, y en reemplazo, se introdujo un artículo en el texto del documento, en el que se mencionan 3 sectores: infraestructura, hacienda y educación, como los involucrados en la plata asignada, la cual, sin embargo, no tiene la respectiva desagregación por proyectos y subproyectos. Son presentadas como partidas globales, que dejan la puerta abierta para ser utilizadas de manera abierta, lo que llevó al exministro a decir que “el Presidente considera el presupuesto como la registradora de una tienda de barrio, que se abre para amigos y se cierra para enemigos”.
En ese contexto, como ya todos los organismos de control, principalmente la Contraloría General, tienen el ojo puesto en la situación, expertos jurídicos han empezado a hablar de la manera con la cual se podría subsanar el ‘yerro’ (o error), y es con otro decreto.
No obstante, aún se desconoce el camino que tomará el Ministerio de Hacienda, que ya ha sido requerido por el ente de control.
Entre tanto, Juan Camilo Restrepo puso el ojo en la novedad, que podría ser una cura peor que la enfermedad, en medio de la búsqueda de una solución. “Mientras más tratan de solucionar el problema presupuestal creado por el mismo gobierno con las partidas globales que ilegalmente introdujeron en el presupuesto para la vigencia del 2024, más enredan las cosas.
Ojo con las vigencias futuras
Insistente, desde que se conoció lo sucedido con el decreto de liquidación del presupuesto, Restrepo dijo que “ahora, la última noticia es que el Ministerio de Hacienda se dispone a renegociar las vigencias futuras sobre las cuales se apoya el desarrollo de la infraestructura”.
Desde la perspectiva de Juan Camilo Restrepo, “sería un golpe de incalculables consecuencias sobre la confianza de los inversionistas nacionales y extranjeros que comprometieron capital y créditos propios en el desarrollo de la infraestructura del país, atenidos a que se honrarían las vigencias futuras”.
El exministro agregó que, tras de que el país está mal en inversión, el panorama a mediano y largo plazo se agravaría. “Encima de que la inversión va mal (pues está en su peor momento en muchos años) con este anuncio el gobierno le pone una lápida al desarrollo de toda infraestructura nueva en el futuro”.