Los cigarrillos electrónicos no se salvaron del impuesto al consumo. Los que se vendan en el país tendrán el mismo tratamiento tributario que los normales, de acuerdo con la resolución 153 del pasado 17 de mayo de 2018, expedida por la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales, Dian.La norma señala que todos los bienes destinados al consumo humano que contengan tabaco, incluyendo los heatsticks –o cigarrillos electrónicos– tendrán que pagar el impuesto al consumo de cigarrillos dispuesto por la norma tributaria.También puede leer: Recaudo de impuestos creció 6,7 por ciento en enero, dice la DianEsta contempla que el pago del impuesto al consumo recae sobre todos los productos denominados cigarrillos y tabaco elaborado, “sin hacer distinción en cuanto a la cantidad de tabaco que contengan ni a su clasificación arancelaria, por lo cual, los nuevos cigarrillos electrónicos, que según la Dian contienen tabaco procesado, están sujetos al pago de dicho impuesto”, dijo en un comunicado el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas.El funcionario destacó además que “este tipo de gravamen, que hemos liderado en foros internacionales, tiene beneficios que van más allá de los ingresos fiscales y tienen que ver con la reducción del consumo de tabaco y el cuidado de la salud de todos los colombianos”.La nueva norma no solo ha tenido impacto en la salud de los colombianos, pues se estima que se podrían salvar unas 337.000 vidas en el país, sino también en las arcas del Estado –pasó de un recaudo de 500.000 millones a un estimado de 1 billón de pesos esperados para este año-, pues en la reforma tributaria de 2016 se dispuso un aumento en el impuesto al cigarrillo que pasó de 700 pesos por cajetilla en 2016 a 1.400 pesos el año pasado y este año alcanzará los 2.100 pesos.En contexto: El uso del cigarrillo electrónico, un debate encendidoCárdenas dijo que esta decisión de política pública mereció el reconocimiento por parte de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), como país líder en la utilización de políticas fiscales para el control del consumo de tabaco. “Tomamos la decisión correcta, generamos más ingresos fiscales y ayudamos a reducir el consumo de tabaco, cuidando la salud de la población. Ahora se hará lo mismo con los cigarrillos electrónicos” dijo Cárdenas.