Aunque en el Ministerio de Hacienda seguramente también están haciendo cuentas para tratar de buscar una solución al hecho de que la reforma tributaria 2024, que fue anunciada para reactivar la economía –implica bajar el impuesto de renta a las empresas del 35 % (actual) al 30 %– con la consecuente reducción del recaudo por tributos, en medio de grandes necesidades de inversión, el Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana hizo un ejercicio antes de que salga a la luz el proyecto de ley.
La idea de reducir la tarifa, que fue incrementada de manera gradual en la reforma tributaria del anterior gobierno, es precisamente estimular a las empresas, de cara a la necesidad de una reactivación económica.
Según explicaciones de Oliver Pardo, director del Observatorio, para lo único que no debe haber cabida en la reforma tributaria que presentará el Gobierno ante el Congreso de la República, después del 20 de julio, es para reducir el ingreso por impuestos que llegan a la bolsa pública.
En ese sentido, su fórmula no solo permitiría incrementar el recaudo, contrario a lo que pasaría si se bajara simplemente la tasa (según lo que se ha sabido hasta ahora de la propuesta del Gobierno si no se hace nada más), sino que, además, se estaría corrigiendo un problema de equidad en el pago de impuestos de las empresas según el tamaño.
Además, la propuesta del Observatorio le pone coto a la tributación efectiva de las personas jurídicas, pues una cosa es lo que se incluye en las leyes y otra muy distinta lo que efectivamente pagan las sociedades, pues se bajan el pago utilizando los beneficios tributarios.
En consecuencia, la idea del Observatorio también es echar ojo a los beneficios tributarios, aunque esa tarea no será fácil, pues nadie en el país tiene claridad de cuántos son y si a quienes les llega son realmente los que lo necesitan.
¿Cómo son las cuentas?
Los expertos en estudios y análisis fiscales parten del hecho según el cual el ingreso percibido por el impuesto de renta de personas jurídicas fue de 80,5 billones de pesos en 2022, lo que equivale al 35 % del total de los ingresos tributarios.
Entre tanto, con una reducción de la tarifa al 30 %, la disminución en el ingreso tributario sería sensible, algo que no se puede permitir el Estado en este momento en el que, por el contrario, se está aplicando un recorte en el gasto público, debido a los menores ingresos por impuestos.
El Observatorio, para elaborar su propuesta, también tuvo en cuenta el escenario del sistema de tributación actual, que es muy desigual: “Las empresas pequeñas y medianas destinan una mayor parte de sus ingresos al pago de impuestos en comparación con las más grandes. Esta regresividad desincentiva el emprendimiento y afecta el crecimiento económico”, argumentaron.
Así las cosas, “para abordar esta situación hemos planteado una propuesta de reforma al impuesto de renta de personas jurídicas que busca establecer una tasa efectiva de tributación más uniforme, independientemente del tamaño de la empresa o de su actividad económica. Esta propuesta tiene dos ejes: una tarifa efectiva mínima y una tarifa nominal del 30 % junto con una sobretasa del 5 % para las rentas líquidas gravables que superen cierto umbral”.