El puente Hisgaura, ubicado en la vía Los Curos-Málaga (en Santander), que no se ha estrenado oficialmente, vuelve a levantar polémica. El nuevo capítulo de esta novela tiene que ver con las denuncias de varios ciudadanos, que señalan que, sin haberse puesto al servicio de los vehículos, ya presenta fallas en su capa asfáltica. Así se vio en las fotos publicadas en redes sociales por miembros de comunidades de la zona, que además dicen que el proyecto no cuenta con iluminación ni tampoco es viable su uso, debido a que la vía que lo conecta está deteriorada. El Fondo Adaptación respondió a estos comentarios e indicó que el contratista (la española Sacyr) deberá hacer las reparaciones pertinentes que se presenten en la estructura, cuyo costó superó los 100.000 millones de pesos.

"La firma constructora Sacyr respondió presentando el protocolo de las reparaciones en el marco de la garantía de calidad de la obra. Sin embargo y dada la situación de emergencia sanitaria por la Covid 19, no ha iniciado el procedimiento. Ante esta situación, el Fondo Adaptación le solicitó un cronograma explícito de ejecución", señaló la entidad en un comunicado. En cuanto a la iluminación, indicó que "por regla general las vías rurales no la contemplan, salvo en los sitios de pasos urbanos, situación que no cobija al puente Hisgaura".

En su concepto, para suplir esta situación, los corredores viales cuentan con la instalación de la señalización y demarcación retroreflectiva, "que es suficiente para indicar la ruta que deben seguir los vehículos en condiciones de baja visibilidad". Así las cosas, la constructora española deberá resarcir los daños generados sobre el asfalto del puente. Paralelamente, seguirá su reclamación con la aseguradora del proyecto para atender un sitio crítico ubicado en la vía de acceso al viaducto.

Esta no es la primera vez que este puente levanta polémica. Meses antes de su entrega, se reveló que su estructura presentaba fallas que podrían afectar su funcionamiento. La forma de acordeón que presentó, en su momento, prendió las alertas de los ingenieros y constructores. No obstante, esto fue reparado por el contratista y el puente pasó su examen final con varias pruebas de carga, que se realizaron entre finales del año pasado y comienzo del 2020.