En el informe del primer trimestre del año, el equipo técnico del Banco de la República redujo su perspectiva de crecimiento económico del país para este año a un rango entre 0,8% y 2,6%, con 1,8% como resultado más probable.Por un lado, antes de la reunión del Emisor en junio empezó un nuevo descenso del precio del petróleo como consecuencia de los anuncios sobre más inventarios y producción de los países que no pertenecen a la Opep.Además, la Reserva Federal de Estados Unidos cumplió con sus anuncios y subió nuevamente su tasa de interés para llevarla a entre 1% y 1,25%, anuncio que se suma a la contracción gradual de US$1 millón en su hoja de balance.El equipo técnico del Banco Central añadió que “el crecimiento de los socios comerciales del país continuaría sustentado por el comportamiento de las economías avanzadas. Los socios de la región siguen con un muy bajo dinamismo”.Recomendado: Economía colombiana se recuperará más lento de lo previsto: BBVAPor otro lado, en el contexto interno, durante el primer trimestre el déficit de cuenta corriente se redujo hasta los US$3.182 millones y aunque como proporción del PIB se mantuvo estable en 4,4%, a comparación del primer trimestre de 2016 representa una caída de 1,5 puntos porcentuales.Sin embargo, el equipo del Emisor advirtió que “a diferencia del año anterior, el ajuste se dio más por un aumento en los ingresos (principalmente por exportaciones mineras) que por una reducción de los egresos”.Además, la información disponible demostraría un comportamiento del PIB durante el segundo trimestre que sería similar al del periodo anterior, que se suma a una “tendencia creciente en la tasa de desempleo” y una desaceleración del crédito bancario tanto para las empresas como para los hogares.Así, los siete integrantes de la Junta Directiva del Banrep coincidieron en señalar que “el deterioro de la actividad productiva ha sido más acentuado de lo que se había previsto” y advirtieron además que hay “señales de un deterioro del crecimiento del sistema financiero que reflejan esta debilidad de la actividad productiva”.Lea también: Inflación vuelve a ubicarse en el rango meta luego de 2 años y medioPor el contrario, la inflación da signos de converger a la meta de 3% en el 2018 por la disolución de los efectos transitorios que la elevaron en los años anteriores y la materialización de la política monetaria contractiva sobre el consumo de los colombianos.Esto llevó a que tres miembros del Emisor votaran por reducir en apenas 25 puntos básicos la tasa de interés y argumentaron que “aunque el deterioro de la actividad productiva hace necesaria una nueva reducción de la tasa de interés, las estimaciones de los equipos técnicos del Banco arrojan todavía incertidumbre sobre la trayectoria de las tasas de interés”.Por su parte, los restantes cuatro miembros votaron por la reducción de 50 puntos básicos en la tasa de interés pues “el deterioro acentuado de la actividad productiva y las expectativas negativas de los agentes económicos en torno al crecimiento exigen estímulos más rápidos que contribuyan a la reactivación económica”.Para las siguientes reuniones, el mercado se divide entre algunas pausas en la política monetaria o disminuciones que sumen en total otros 50 puntos básicos para que al final del año la tasa de intervención del Emisor sea de 5,25%, lo que le permitiría nuevas disminuciones en el 2018 ya con la inflación nuevamente en el rango meta y una mejor proyección de crecimiento económico.Puede interesarle: Consumo interno podría seguir bajando este año