Durante este martes, 25 de junio, la Superintendencia de Industria y Comercio anunció la formulación de un pliego de cargos y el inicio de una investigación contra tres empresas colombianas, que se dedican a la comercialización de ciertos medicamentos. Las empresas habrían incurrido en algunas anomalías, según el ente de control.
Se trata de la empresa Grupo Ferrer Internacional S.A, Ferrer Colombia S.A.S, y Pint Pharma Colombia S.A.S, que son las empresas encargadas de la distribución del medicamento Remodulin, que es utilizado para controlar la hipertensión arterial pulmonar. Con la investigación, buscan que se determine si las compañías habrían infringido en el régimen de protección de la competencia y la competencia desleal.
El organismo sospecha que las empresas habrían realizado distintas actuaciones para eludir la regulación del control directo de precios del medicamento mencionado, con el fin de incrementar su valor en el mercado.
“Para explicar en qué consistió la conducta investigada, debe tenerse en cuenta que la regulación de precios máximos del medicamento Remodulin estaba determinada por el código único de medicamento (CUM) asignado a ese producto. Para eludir de esa regulación, Ferrer Internacional habría realizado una modificación formal a la presentación del medicamento, lo que le permitió obtener la asignación de nuevos CUM y, por lo tanto, no quedar sujeto al precio máximo establecido en la regulación”, indicó la SIC.
El organismo aseguró que la estrategia que habría utilizado la empresa mencionada consistió en adicionar unos dispositivos que no eran fundamentales para la aplicación o efectividad del medicamento, que podrían adquirirse por separado y que no justificaban la significativa diferencia entre el precio de venta y el regulado.
Como consecuencia de esa actuación, las 3 empresas implicadas habrían comercializado medicamentos con la misma composición y cantidad que el medicamento regulado, pero con un precio excesivamente mayor al determinado en la regulación. La diferencia entre el precio sería de más del 150% sobre el valor regulado.
Es importante tener en cuenta que el Remodulin se comercializa principalmente en el canal institucional debido a su alto precio. Por lo anterior, el comportamiento habría generado un posible detrimento al Sistema General de Seguridad Social en Salud, que es el encargado de abastecer los fármacos para los afiliados del sistema.
Respecto a las posibles sanciones que recibirían las empresas, la SIC asegura que a cada persona jurídica se le podría imponer una multa de unos 100.000 SMLMV. Además de ello, también se podrán imponer órdenes dirigidas a que la realización de las actividades económicas de las investigadas se adecúe a la normativa aplicable en materia de libre y leal competencia. Finalmente, el organismo detalle que contra esta decisión no procede ningún recurso.
A inicio de este año, la SIC también detectó una práctica similar con 14 medicamentos que se vendían por encima de los precios máximos de ventas fijados por el Gobierno Nacional.
La Dirección de Investigaciones para el Control y Verificación de Reglamentos Técnicos y Metrología Legal de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) decidió sancionar en primera instancia a la sociedad mayorista Outsourcing Farmacéutico Integral S.A.S con multa de $8.311.950.000, que son equivalentes a catorce mil cien salarios mínimos legales mensuales vigentes (14.100 SMLMV), por vender medicamentos por encima del precio máximo fijado por el Gobierno Nacional.
“La SIC, en su función de inspección, vigilancia y control para el cumplimiento del régimen de fijación de precios, requirió a todas las Entidades Promotoras de Salud (EPS) del país con el fin de que remitieran la información sobre las compras de medicamentos entre los meses de abril y septiembre del año 2012″, indicó el organismo regulador.