El pasado lunes 5 de febrero, un grupo de unos 50 individuos que fueron autodeterminados como campesinos, invadió una propiedad de la vereda la Capilla, en el municipio de Cajibío, Cauca, según señaló a medios locales y regionales Smurfit Kappa Colombia.
Al parecer, este grupo irrumpió en el lugar de manera violenta, amenazando y reteniendo en el interior de la finca a su administrador, su esposa y un menor de edad, mientras ellos lanzaban piedras y artefactos explosivos de fabricación artesanal, como también pintaron consignas en las paredes, poniendo en riesgo la integridad y seguridad de quienes estaban siendo retenidos al interior.
Tras enterarse de esta retención ilegal, la empresa notificó de inmediato a las autoridades pertinentes. En colaboración con el Gaula Militar y la Policía Nacional, se ejecutó un operativo conjunto que resultó en el rescate de la persona afectada sin que sufriera daños físicos.
Es fundamental subrayar que, hasta la fecha presente, la finca La Capilla sigue siendo ocupada por este grupo de individuos. Por esta razón, la empresa insta de manera urgente a las instituciones y autoridades competentes a emprender todas las medidas necesarias para asegurar el derecho a la propiedad privada, al trabajo y a la libre circulación. Asimismo, llama a las comunidades a que, de manera colaborativa, se siga promoviendo una convivencia pacífica entre los actores del entramado social y empresarial del municipio de Cajibío.
De igual manera, Smurfit Kappa reafirma su compromiso de seguir operando su actividad forestal en la zona, a pesar de esta coyuntura. Esta actividad no solo proporciona empleo, sino que también contribuye al bienestar de los residentes. La empresa también realizará programas de desarrollo comunitario diseñados para fomentar el progreso de la región y de sus habitantes.
Recordando un previo conflicto. Kappa denunció que la comunidad indígena Misak estuvo llevando a cabo un proceso que habrían denominado “Recuperar la tierra para recuperarlo todo”. Desde finales de julio, han estado demandando la retirada de la empresa Smurfit Kappa Cartón de Colombia de su territorio. En los últimos meses, se habrían realizado varios actos, incluyendo el izamiento de la bandera de sus comunidades en una de las propiedades de la empresa en la zona rural de Cajibío, Cauca. Además, habrían protagonizado protestas con el objetivo de recuperar la tierra que consideran que les fue arrebatada por Smurfit.
Todo esto, cuando Colombia se hallaba enfrentando la catástrofe climática, a raíz de los incendios.
Smurfit Kappa ha afirmado que decidió hacer públicos los acontecimientos que están teniendo lugar con el objetivo de buscar la garantía de “protección de los derechos de propiedad privada, integridad y seguridad personal de los trabajadores forestales y de las comunidades residentes”. Además, abogaban por la protección del derecho al trabajo, el disfrute de un entorno saludable y el derecho a la libre circulación. Según su denuncia, estos derechos se ven comprometidos como resultado de los actos de perturbación.