Popularmente se ha conocido un dicho que dice: “al caído caerle”, y aplica cuando se está pasando un momento difícil y a ese se le suman otros problemas más. Pues algo muy similar pasaba con aquellos universitarios o profesionales que respaldaron económicamente sus estudios y no conseguían empleo, se quedaban sin trabajo, quebraban en sus emprendimientos o simplemente no recibía ningún ingreso, pero aun así tenían la angustia mensual de tener que pagar su crédito.

Solo quienes han tenido deudas y son responsables, saben la sensación que experimentan. Sobre todo porque retrasarse en pagos de cuotas con estas entidades representa inmediatamente estar reportado en las centrales de riesgo y afectar su vida crediticia. Pero eso será cuestión del pasado para los nuevos usuarios del Icetex, pues el Gobierno nacional es consiente que una crisis económica la puede afrontar cualquier ciudadano y que tales dificultades tarde que temprano se superan.

Así, a través de ley, el Icetex tiene un mecanismo que como aclara el presidente de la entidad, Manuel Acevedo Jaramillo, es opcional para quienes lo quieran aceptar, pues requiere algunas condiciones que ayudarán a realizar el control de ingresos del deudor. “Esto es verdaderamente el cambio total de la estructura de servicios del Icetex. No va a ser que haya una cuota que se pague mensualmente, sino que cada mes hay una comprobación del valor de los ingresos de la persona, y esto se contrasta con una tabla de ingresos y así se define que valor debe pagar ese mes la persona.

Esta medida que ya está en proceso de reglamentación, de manera más concreta funcionará así: tiene que ser un acuerdo voluntario que permita a las dos partes hacer un pacto, el deudor accede a que la Dian comparta al Icetex información reservada sobre sus ingresos. Así que a través del sistema de nomina digital, el Icetex puede saber cuánto dinero recibió de salarios y para las personas que trabajan como contratista se podrá monitear sus ingresos gracias al sistema de factura electrónica.

Con el valor que se conozca de los ingresos, el Icetex contrastará la información en una tabla de calculo que se estipulará próximamente, através de un decreto que definirá los parámetros y así se tabulará el valor a pagar. El valor de la cuota mensual puede ser el 10 % o 15 % de los ingresos mensuales. Es decir, si en un mes la persona no tuvo ingresos, el valor a pagar es cero, por tal razón no saldrá en mora, estará al día y no tendrían por qué reportarlo en las centrales de riego financieras.

Esta estrategia, si bien a gustado a algunos usuarios, no todos ven el beneficio, pues no están de acuerdo con que un tercero conozca sus estados financieros. O les genera incertidumbre el no conocer un valor fijo de cuota, para programar sus pagos.

El presidente del Icetex aclara que nadie será obligado a tener esa modalidad de crédito, aunque para él genera muchos beneficios indica que los usuarios podrán seguir con el sistema de crédito tradicional que consiste en que el Icetex tiene en cuenta tres variables, 1. Capital adeudado; 2. Plazo en meses, 3. Intereses, y una calculadora financiera estima la cuota periódica a pagar, y si en ese mes la persona no paga entra en mora y es reportado.

Acevedo Jaramillo recuerda que el 88 % de los usuarios del Icetex no pagan intereses y que quienes lo hacen tendrán una reducción importante de ellos con el decreto que firmó el Gobierno nacional el pasado 7 de diciembre. De igual manera, resaltó que se otorgarán estímulos y alivios considerables, que corresponden a un esfuerzo importante que se verá reflejado en 130.286 jóvenes que no tienen interés subsidiado en su crédito educativo y que se cobijarán con la reducción de la tasa que no superará el IPC más 7,5 puntos.

Otros que recibirán beneficios son aquellos que llevan un buen comportamiento de pago, su tasa será de IPC más 6,5, menor al restante.

Más de 80.000 usuarios actuales, y nuevos beneficiarios, que presenten dificultades o se destaquen por logros académicos, deportivos, científicos y culturales, contarán con un nuevo paquete de estímulos y alivios, que reducirán el costo de su crédito.