La economía estadounidense es una con características robustas y que ha regido gran parte del continente y el mundo durante los últimos tiempos, gracias a un baluarte monetario clave que sostiene e incluso da dirección a las demás monedas del mundo, el dólar.
Ya hace algunos meses una “mini caída” desde Norteamérica encendió las alarmas del mundo financieramente por la quiebra del Silicon Valley Bank, a pesar de que las afectaciones y efectos serían bastante colaterales y a largo plazo, lo que podría llevar a pensar que una crisis mayor, podría conllevar a un caos total.
También es importante recordar que en estos momentos Estados Unidos ya posee una deuda importante a nivel nacional con el Departamento del Tesoro, debido a que en cierto momento de los últimos años, la cantidad de fondos era insuficiente para adquirir algunos gastos, por lo que tuvo que pedir dinero a este Departamento.
Según reportes, esta deuda tiene recursos para financiar hasta el 1 de junio, por lo que sería clave que el Gobierno americano y el Departamento del Tesoro concretaran una negociación que ya se encuentra en proceso, y que acabe permitiendo ampliar el techo de esta deuda a pagar, dado que de no ser así, las estimaciones aseguran que para esta fecha, Estados Unidos no tendría fondos para hacer frente a algunos compromisos.
Es necesario aclarar que este contexto es bastante lejano y poco probable, pero puede llegar a ser importante analizar las consecuencias que estos podría traer en caso de que Estados Unidos cometa acciones como no extender el límite de la deuda, lo que a su vez podría conllevar que Estados Unidos caiga en un incumplimiento financiero, en una serie de sucesos que seguramente se tratarían de algo inédito y contraproducente para la economía mundial que ya de por sí se encuentra en recuperación.
Este inclumiento podría darse de 2 maneras según Jack Janasiewicz, Gerente de portafolio de Natixis IM Solutions, uno técnico es decir, una falta en los pagos para los pasivos financieros de Estados Unidos, y un incumplimiento real que afectaría de manera más macro al país americano, lo que explicado de mejor manera es una falta de pago por parte del gobierno americano hacia todas sus obligaciones.
En el caso del contexto colombiano, el impacto mayor se daría en caso de presentarse un incumplimiento técnico, debido a que debilitaría el dólar y los activos estadounidenses, como lo explica Janasiewicz:
“Las monedas de los mercados emergentes probablemente se debilitarían en relación con el dólar estadounidense, mientras que las acciones se liquidarían en un movimiento de reducción del riesgo que haría que las acciones estadounidenses obtuvieran un rendimiento inferior al de otras acciones regionales en un entorno de aversión al riesgo” de esta manera el peso colombiano también se vería altamente afectado y junto con esto, los costos de producción y finales de diversos productos de importación, debido al ajuste que posee la moneda nacional en medida del dólar americano.
De esta manera y en un contexto más global, los consumidores y las inversiones empresariales también se verían altamente afectadas, lo que contribuiría de mayor manera en la depresión del dólar, debido a que habría poco confianza por parte de estos sectores hacia la economía estadounidense, que empezaría a mostrarse inestable.
Finalmente, también sería clave destacar las afectaciones en materia política, debido a que seguramente se presentarían diversas reacciones alrededor del mundo, que podrían ser apresuradas a causa de la crisis, y que generen implicaciones incluso mayores en las economías de esos países en concreto, y tendrían que empezar a regir algunos costos en base a otras monedas como el yen japonés, el euro o el franco suizo.