Antes, el municipio contaba solo con una laguna de oxidación, que hacía que el tratamiento de aguas residuales fuera insuficiente. Por eso la nueva planta era una necesidad de primer nivel en ese sentido, con el propósito de mantener la salud pública y evitar los riesgos en el consumo de alimentos, que podrían sufrir contaminación a causa del vertimiento de aguas residuales, especialmente en los sectores agrícola y pecuario.
La obra beneficiará a más de 12.000 habitantes del municipio y ayudará a la conservación del Río Chicú y del Río Bogotá. La planta tiene capacidad para tratar en promedio 40 litros de aguas domésticas residuales por segundo, lo que la hace una de las más modernas que hay actualmente en el departamento. El promedio de otras plantas es de 28 litros por segundo.
Además, tiene un sistema de tratamiento de desinfección ultravioleta que, a través de lámparas UV, elimina cargas patógenas sin afectar la calidad del agua. El proceso de desinfección en plantas menos modernas se lleva a cabo mediante el uso de cloro, un químico que, si no se dosifica adecuadamente, puede deteriorar la calidad del agua.
“El sistema está compuesto por un sistema anaerobio y uno aerobio. Estos dos permiten que la remoción de residuos sea del 95 %, un agua con altísima calidad, mientras que el promedio general en otras plantas oscila en un 70 %, pues son muy pocas las que fusionan estos dos métodos en el país”, agregó la ingeniera Laura Arroyo, quien se desempeñó como directora de la planta.
La alcaldesa de Tenjo, Sonia Patricia González Bernal, explicó que “desde el año 2016, hasta 2019, este contrato tuvo tres adiciones y ocho suspensiones, que retrasaron significativamente la puesta en servicio de nuestra PTAR, sumado a que esta debió ser demolida en su totalidad y construida nuevamente desde el 18 de octubre de 2019, con una fecha prevista de finalización del 27 de octubre de 2020. A partir del 1 de enero de 2020, cuando la administración Tenjo es de Todos 2020 – 2023 inició sus actividades, pusimos todo nuestro empeño para continuar con las labores que hoy dan como resultado la finalización de esta importante obra”.
Así es como la planta evita la contaminación de las fuentes hídricas del municipio, cumpliendo la Resolución 2564 de 2019, de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR).