Desafíos a granel es lo que hay con la transición energética. Sobre todo, si en realidad se hará con el famoso apellido de ‘justa’.

Oferta, demanda, disponibilidad de fuentes que acompañen la energía que proviene de los combustibles líquidos -sin reemplazarlos del todo- tendrán que estar en el horizonte.

Pero un punto clave, que si toca las fibras de la justicia con los colombianos, es el del parque automotor, el cual, en la actualidad, ya tiene 18 millones de vehículos en circulación y cuenta además con otros 250.000 que ingresan cada año, mientras se tiene la estimación de descarbonizar a 2050, año en el que se prevé que se duplicaría el parque automotor. Es decir, se está dejando que los colombianos compren carros que tendrán que salir del escenario y ser reemplazados rápidamente por vehículos eléctricos, híbridos o de cualquier otra clase que contamine menos.

Por todas esas circunstancias, Tomás González, exministro de Minas y presidente de Cree (Centro Regional de Estudios Energéticos), se lanzó a expresar una dura crítica, en el marco del Foro Petróleo y Gas, que realiza la ACP en Barranquilla. “No es solo con sol y viento que se hace transición energética”.

González habló de la necesidad de tener una amplia oferta de fuentes energéticas y del alto costo que implicará una transformación, lo que equivaldría a una cifra que requeriría el equivalente a varias reformas tributarias

El experto se refirió a los tiempos previstas para la transición energética, que suenan muy cortos en medio de las demoras que hay para que se adelanten los proyectos de las energías alternativas, que, principalmente, están basadas en sol y viento.

Tomás González, exministro de Minas.