Los precios del petróleo subieron el miércoles tras una fuerte caída de las reservas estadounidenses de crudo la semana pasada, mientras la demanda sigue sostenida.
El barril de Brent del mar del Norte para entrega en enero de 2023 ganó 1,59 % a 96,16 dólares en Londres.
En tanto el West Texas Intermediate (WTI) para diciembre ganó 1,84 % a 90,00 dólares en Nueva York.
Las reservas comerciales de crudo en Estados Unidos llegaron a su nivel más bajo desde noviembre de 2014, según cifras publicadas el miércoles por la Agencia estadounidense de Información sobre Energía (EIA).
En la semana que terminó el 28 de octubre, estas reservas bajaron en 3,1 millones de barriles (mb) cuando los analistas esperaban una ligera caída de apenas 200.000 barriles. La semana anterior habían tenido un fuerte incremento que sorprendió al mercado.
Esta caída de las reservas de crudo, que se ubican ahora en 436,8 millones de barriles, se explica principalmente por el incremento de la actividad de las refinerías, que aumentaron el procesamiento de crudo tras el período de mantenimiento y cuando se aproxima el invierno boreal, explicó Andrew Lebow, de Commodity Research Group.
Las refinerías estuvieron trabajando a 90,6 % de su capacidad la semana pasada, frente a 88,9 % una semana antes.
La demanda de productos petroleros también se mantuvo en niveles importantes, en 20,4 millones de barriles diarios, frente a 19,9 millones hace un año.
“Grosso modo, tenemos una producción más débil y una demanda (de las refinerías) más fuerte. Eso explica esta retracción de las reservas comerciales”, sostuvo Lebow.
Vale la pena recordar que el dólar en Colombia cerró por encima de los 5.000 pesos, según la Bolsa de Valores de Colombia, al quedar en un promedio de 5.016,05 pesos, mientras que el valor máximo pagado por la moneda estadounidense fue de 5.038,50 pesos.
La decisión de la FED (Reserva Federal) sobre las tasas de interés en Estados Unidos fue lo que pesó, causando la incertidumbre que esperaba el mercado.
La incertidumbre está enmarcada por la compra de dólares de los inversionistas, lo que los analistas explican que ha provocado el incremento de la divisa estadounidense. Sin embargo, el mensaje de la Reserva Federal es contundente. Este anuncio es un llamado a la calma para los mercados ante una eventual recesión económica de cara a 2023. Las tasas se suben para deprimir los mercados. Entre más duro se suben las tasas, más fuerte es la depresión de la economía.
El resultado que esperan es que las personas dejen de comprar dólares, si la demanda baja; así mismo, comienza a ceder el precio del dólar, porque la demanda también bajó.