El Consejo Regulador del Tequila, la entidad responsable de supervisar y regular la producción, calidad y denominación del origen del tequila a nivel internacional, ha revelado que Colombia ocupa el segundo lugar en cuanto a consumo de tequila en América Latina, siendo superado únicamente por México.
Es en este contexto, que la bebida alcohólica ha demostrado que tiene cierta capacidad para trascender fronteras y convertirse en ese distintivo que tiene la cultura y la tradición mexicana a nivel global. Así surgen estos cinco datos curiosos que rondan la bebida.
El tequila ha servido como fuente de inspiración para canciones, poesías, obras artísticas y producciones cinematográficas. Incluso en la ciudad de Tequila, Jalisco, existe un museo dedicado exclusivamente a esta emblemática bebida, el cual explora su historia, proceso de producción y su impacto cultural.
Además, al ser la segunda bebida alcohólica más exportada después del whisky, el tequila trasciende fronteras, llevando consigo el sabor y la tradición a diversos rincones del mundo. Desde su intrigante origen hasta sus múltiples usos y preparaciones, el tequila sigue siendo un símbolo de celebración que une a personas de todas las culturas y lugares del planeta.
En su origen
La historia de la elaboración del tequila remonta a la época prehispánica, cuando se producía una bebida fermentada conocida como “pulque” a partir del agave. Así, fueron estas figuras en las antiguas comunidades quienes reconocieron el potencial que tenía el agave azul para destilar una única bebida, por lo que con el transcurso del tiempo esto se convirtió en el acompañante de las celebraciones para los mismos.
Es así como Ernesto Acuña, director de Marketing de Tequila Don Ramón, asegura, “el tequila ejemplifica cómo las tradiciones antiguas evolucionan con el tiempo, desde su descubrimiento del agave azul hasta convertirse en una bebida emblemática mundial. La sociedad tiene la capacidad para revitalizar prácticas pasadas, creando un legado que une a las personas a través de las generaciones y fronteras”.
Además, el tequila no solo es una bebida, sino también un municipio del estado de Jalisco, que significa “lugar donde se trabaja”.
En su denominación
No todo se reduce al tequila, ya que esta bebida única se puede fabricar solamente en cinco estados de México: Jalisco, Nayarit, Guanajuato, Michoacán y Tamaulipas. A diferencia del mezcal, que puede hacerse con más de 20 tipos de agave distintos, el tequila se destila solo con agave azul.
El proceso de producción del tequila es un verdadero arte, donde la bebida debe contener al menos un 51 % de azúcares provenientes del agave azul. Desde la meticulosa selección de los agaves maduros hasta su destilación, cada paso es esencial para lograr el característico sabor y calidad que lo distingue. Todos los productos de Tequila Don Ramón son elaborados con el 100% de agave azul.
En su elaboración
“Cada paso, desde la maduración del agave hasta la destilación del jugo fermentado, es esencial para lograr el sabor distintivo y la calidad inigualable que define al tequila”, comentó Acuña. “Después de la fermentación, el líquido resultante se destila dos veces, una técnica que resalta los sabores y aromas característicos del agave”.
La espera se convierte en una virtud en el ámbito del tequila, pues la planta de agave azul necesita entre 8 y 12 años para alcanzar su completa madurez antes de ser cosechada. Este proceso esencial asegura la calidad y la riqueza del agave utilizado en la producción. Una vez recolectada, la parte central de la planta, llamada “piña”, se somete a un proceso de cocción y triturado para extraer su jugo dulce y lleno de azúcares.
Después, el tequila se puede añejar en barricas de roble durante diferentes lapsos, dando matices y complejidad a su perfil de sabor.
En sus usos y preparaciones
El tequila va más allá de ser solo un componente en cócteles clásicos como la margarita o el tequila sunrise; su versatilidad se expande al ámbito culinario, donde aporta un toque único y delicioso a una amplia variedad de platos, desde salsas hasta postres.
“El tequila no solo es un elemento en cócteles tradicionales, sino que también se revela como un ingrediente culinario versátil. Su incorporación en la cocina realza el sabor de una diversidad de platos, demostrando su capacidad para innovar y agregar un toque distintivo a la gastronomía”, comentó Acuña.