La compañía sueca de telecomunicaciones Ericsson se desplomó hasta un 14,5 % este miércoles en la Bolsa de Estocolmo, después de haber publicado un comunicado en el que reconocía que podría haber realizado pagos al Estado Islámico (ISIS) en Irak para poder circular por determinadas rutas de transporte.
“La investigación (...) encontró varias violaciones de las reglas de ‘compliance’ y del Código de Ética Empresarial”, reconoció la empresa que ha citado malas prácticas, como realizar donaciones sin beneficiarios claros, pagar a proveedores por trabajos no concretados, usar proveedores para realizar pagos en efectivo, abonar gastos inapropiados y conflictos de interés.
Tras las pesquisas, varios empleados dejaron la firma y se adoptaron varias medidas disciplinarias. “El equipo investigador también identificó pagos a intermediarios y el uso de rutas de transporte alternativas en conexión con el fin de evitar la Aduana iraquí en un momento en el que organizaciones terroristas, incluyendo ISIS, controlaban algunas rutas de transporte”, indicó Ericsson, aunque ha matizado que la investigación no pudo determinar el destinatario último de los pagos.
*Con información de Europa Press.