El Ministerio de Hacienda y Crédito Público anunció la colocación de 150.000 millones de pesos en Títulos de Tesorería (TES) a corto plazo, denominados en pesos, que tendrán vencimiento el 4 de septiembre de 2024 en el mercado local.

Se recibieron posturas de compra por $ 248.000 millones en valor nominal, equivalente a 1,7 veces el monto ofrecido correspondiente a $ 150.000 millones. La tasa de interés de corte fue de 11,698 % para la referencia a un año.

“El programa de colocaciones de TCO hace parte de la estrategia de la Nación de contribuir con el desarrollo del mercado de capitales interno, incorporando referencias líquidas en la parte corta de la curva de rendimientos”, explicó la cartera de Hacienda y Crédito Público.

Para este viernes, 29 de septiembre, está estipulada la reunión de la junta directiva del Banco de la República, donde los codirectores, el gerente y el ministro de Hacienda tendrán que tomar la decisión de dejar las tasas de interés de referencia, que están en 13,25 %, o empezar el ciclo bajista, como ya lo han iniciado países vecinos como Chile, Brasil y Perú.

En el sector bancario colombiano se ha reducido el número de personas interesadas en obtener préstamos. Los colombianos no pueden comprar casa y el consumo ha bajado porque los ingresos mensuales están siendo devorados por la inflación y ni se les ocurra comprar con tarjetas de crédito porque las tasas de interés están por las nubes.

Esto ha provocado una desaceleración de la economía y cuando esto sucede también puede afectar al empleo, porque si las empresas no producen tampoco contratan. Es más, es posible que incluso recorten sus salarios.

La preocupación se vislumbra en el horizonte, por lo que el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, se sumó a la voz de los empresarios, insistiendo en que ayudará, a través de su participación en la junta directiva del Banco de la República, a comenzar a cambiar el rumbo previsto, que incrementó las tasas de interés de los créditos para intentar contener la inflación.

Mientras tanto, dentro del equipo directivo que maneja la política monetaria se han escuchado voces, como la de Roberto Steiner, uno de los miembros de la junta, que da señales de que no hay consenso en apoyo al pedido del ministro y los empresarios.

Este contexto fue recogido por investigadores de Corficolombiana, que pusieron el termómetro a esta cuestión y coincidieron en que el Banco de la República, más que nunca, se enfrentará al dilema de reducir o mantener estable la tasa de política monetaria en 13,25 %.

De hecho, para Corficolombiana, la junta tiene una buena razón para estar en contra de recortar las tasas, a saber, que “la inflación al consumidor está cediendo más lento de lo previsto, sigue en dos dígitos y es la más elevada entre las principales economías de la región”.