Después de tres meses de haber sido elegido como gerente de la Federación de Cafeteros, Germán Bahamón sigue sin lograr una línea directa con el presidente Gustavo Petro. La situación llevó este lunes al economista y exministro de Hacienda, Rudolf Hommes, a hacer una curiosa sugerencia al directivo del gremio cafetero: “Debería renunciar al cargo, por el bien de la comunidad cafetera”, trinó Hommes, quien permanece muy activo en las redes sociales.

En abril, el presidente había pedido el aplazamiento de la elección del nuevo gerente, quien sería el reemplazo de Roberto Vélez, a quien pidieron la renuncia.

Sin embargo, el Comité Nacional de Cafeteros procedió a ejercer su derecho de autonomía y eligió a Bahamón. Es decir, el camino no se dio como se lo planteó el mandatario, quien terminó diciendo que le habían metido los dedos en la boca con la elección.

A juicio de Hommes, el nuevo gerente “cometió un error al presentarse”, pues el presidente recibió el hecho como un ‘gol’ que le metieron.

El economista, que siempre ha sido crítico de la administración, enfatiza en que “a ningún presidente le gusta que le hagan eso, y menos a este”.

El asunto es que en la mitad de las fricciones está el Fondo Nacional del Café, que es el que recibe los recursos que aportan los caficultores, por lo cual, el gobierno tiene cartas en el tema (son recursos públicos, por ser parafiscales, aunque los aporten los privados). Adicionalmente, el Estado activa recursos para los caficultores, cuando requieren renovación de cafetales y otras medidas que impulsen el sector clave, tanto para la agricultura como para la industria, dos temas claves para el gobierno actual.

Recientemente, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, mencionó la situación con la Federación de Cafeteros y dijo que están revisando cuál ha sido el resultado del mencionado fondo, el cual, al parecer, tendría incumplimientos con las compras de contratos de café a futuro.

Lo cierto es que la Federación de Cafeteros requiere tener una estrecha relación con el Gobierno, algo que aún no se consolida.

Caficultura.