La Cuarta Revolución Industrial en Colombia está cada vez más cerca, aunque algunos expertos señalan que ya empezó. Con esto, poco a poco empiezan a cambiar las exigencias y dinámicas del mercado, donde la tecnología y el comercio electrónico están jugando un papel fundamental.

Con la llegada de la pandemia y el confinamiento, tanto clientes como las empresas, se dieron cuenta de un nuevo panorama de alternativas que no se estaba usando, apalancado en su mayoría por las compras desde casa o a distancia y la utilización del retail como herramienta principal para la comercialización de productos.

Conocedores de las nuevas dinámicas del mercado mundial sostienen que ya se está viviendo la “cuarta revolución”, caracterizada por sistemas inteligentes interconectados que resuelven problemas complejos de la cotidianeidad a una velocidad nunca antes vista.

Tecnologías de analítica, big data, machine learning e inteligencia artificial son las responsables de estos avances, y su irrupción en los procesos propios de las industrias llegó para garantizar un mejor servicio a sus clientes y de paso ahorrarse recursos y tiempo.

Debido a lo anterior, no es extraño que los usuarios hayan encontrado en las plataformas digitales una modalidad efectiva para adquirir productos. Durante los dos años de pandemia se incrementó exponencialmente el uso de canales e-commerce frente a medidas que favorecieron su crecimiento, como las cuarentenas y restricciones de desplazamiento.

Según cifras de BlackSip y la Cámara Colombiana de Comercio Electrónico (CCCE), las transacciones realizadas a través de plataformas digitales en el país habrían tenido un incremento del 40 % durante 2021, alcanzando un movimiento total de $ 40 billones de pesos, lo cual es reflejo de la necesidad de avanzar respecto a lo que exigen los clientes hoy en día.

Así mismo, recientemente el Gobierno nacional dio a conocer las cifras de crecimiento económico del país durante el año 2021, las cuales evidencian que el balance es más que positivo ya que el índice de crecimiento alcanzó un 10,2 %, poniendo a Colombia nuevamente en la mira del mercado de exportaciones.

Según la firma SimpliRout, “todo esto es el resultado de empresas y organizaciones que han avanzado en sus procesos de la mano con la transformación digital, adoptando soluciones inteligentes que contribuyen al establecimiento de nuevas dinámicas empresariales, con repercusiones especialmente en la logística y servicio al cliente”.

“El sector retail es un ejemplo de lo anterior. Dadas las circunstancias que trajo consigo la pandemia, debió desarrollar plataformas comerciales digitales con una capacidad de respuesta efectiva en todos los aspectos, que además tuviera capacidad de soportar temporadas de alta demanda, como los días sin IVA y la temporada navideña”, explica esta firma en un análisis de las necesidades del mercado, revelado recientemente.

Frente a este punto, SimpliRout (empresa enfocada en servicios de logística) resalta que no basta con que las organizaciones preparen sus sitios web, sino que además, hay toda una cadena de logística y despacho que es necesario robustecer y hacer más expedita para llegar en el tiempo y forma comprometidos a sus clientes.

“Para dar respuesta efectiva a parte de la operación, han debido evolucionar en sus procesos; por lo mismo, esta evolución se puede ver reflejada en el crecimiento del país, y al mismo tiempo en el aumento de las expectativas de los consumidores colombianos”, explica esta firma.

Por último, el análisis de esta empresa sobre las necesidades actuales del mercado resalta que no se puede hacer a un lado el componente ambiental, ya que temas como el desarrollo sostenible y cuidado del medioambiente tienen un alto índice de favorabilidad entre los clientes, razón por la cual no pueden ser obviados.