Avianca emitió este domingo 5 de marzo un contundente pronunciamiento en torno al proceso de integración con Viva Air, dejando clara su injerencia o participación al interior de la aerolínea de bajo costo y las medidas legales que estaría contemplado adoptar ante las “calumnias” que se han generado frente al tema y que habrían sido motivadas por otras empresas del sector del transporte aéreo.
Indicó que los accionistas de la compañía “adquirieron los derechos económicos de la aerolínea Viva en abril de 2022 en una transacción ejecutada con toda transparencia”, acotando que dicho proceso se hizo público y fue informado por diferentes medios de comunicación, a los que se les suministró información detallada al respecto.
“Dicha transacción se realizó en cumplimiento de la Resolución 10390 de 2015 de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) que avala explícitamente la estructura de separación de negocios (segregando derechos económicos de los políticos) e indica con claridad que la ausencia de control es el principal criterio para evaluar la independencia de las partes”, afirmó.
Por lo que sostuvo que “ni Avianca ni sus accionistas han tenido influencia alguna en la gestión de la línea aérea Viva, dando cumplimiento cabal a dicho criterio”.
También expresó que “en todo momento, antes y después de la transacción, tanto Avianca como la aerolínea Viva han competido agresivamente, sin influencias ni coordinación y en cumplimiento con la Ley”, incluso en el marco de la suspensión temporal de operaciones anunciada públicamente por la aerolínea de bajo costo.
“Avianca rechaza de manera tajante la desinformación, las calumnias y las noticias falsas realizadas por agentes de nuestros competidores y se reserva el derecho a tomar todas las acciones legales que correspondan”, aseveró.
Finalmente, la compañía manifestó que respetará el rol que tienen las autoridades en investigar y supervisar, y que cooperará ampliamente en el marco del debido proceso en lo que se requiera para aclarar las dudas que haya lugar, en aplicación al ejercicio del derecho a legítima defensa.
Este pronunciamiento se da tras conocerse que esta semana la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) realizó una visita sorpresa a la sede de Avianca, en Bogotá, y a la sede de Viva Air, en Rionegro. Esto, como parte de una serie de acciones que viene efectuando el ente de control, con el objetivo de esclarecer cómo fue la decisión en torno al cese de operaciones de la aerolínea de bajo costo, y que ha afectado a miles de ciudadanos en el país.
Al respecto de esta acción y mediante un comunicado, la SIC afirmó que “las actividades investigativas que realiza en el marco de la etapa preliminar de su actuación administrativa, incluyendo visitas administrativas a las sedes de los agentes de mercado, tienen carácter reservado de conformidad con el artículo 13 de la Ley 155 de 1959. En consecuencia, por mandato legal, esta Autoridad no puede realizar ningún pronunciamiento al respecto”.
Hasta el momento, sobre los resultados de dichas visitas, no se ha emitido información por parte del ente de control. Sin embargo, y coincidencialmente, esta acción se produce luego de la solicitud que realizó el director de la Aeronáutica Civil, Jorge París, quien invitó a los pasajeros afectados acudir a la SIC para interponer las denuncias respectivas frente a la vulneración de sus derechos como consumidores, por la no prestación de servicios por parte de Viva Air. “Quisiéramos ver una sicatón”, fue el mensaje del funcionario a los afectados por esta situación.
Se prevé que para el próximo martes 7 de marzo se conozca por parte de la Aerocivil si autorizó o no la integración de las dos aerolíneas, respuesta definitiva que se daría tras siete meses de espera.