El 68% de la capacidad instalada de generación de energía eléctrica del país está concentrada en el recurso hídrico, lo cual genera una alta volatilidad de los precios de la energía que cotizan en bolsa por cuenta de factores no previsibles como el clima, de acuerdo con Bbva Research, que aconsejó al país diversificar sus fuentes de energía.
Tras realizar un diagnóstico al sistema eléctrico nacional, sus pares de la región y la situación actual de este sector en el mundo, la entidad señaló que la transición energética del país ya está en marcha con la subasta de Fuentes de Energías Renovables No Convencionales (FNCER) adjudicada en 2019, con lo cual se pretende diversificar la matriz energética y reducir la dependencia del recurso hídrico que es altamente susceptible a anomalías climáticas.
Según las cifras obtenidas, el 68 % de la capacidad instalada de generación eléctrica del país está concentrada en el recurso hídrico. “Esto causa una alta volatilidad de los precios de la energía que cotizan en bolsa, pues están sujetos a la variabilidad de las condiciones climáticas”, señaló el economista principal de Bbva Research y uno de los autores del informe, Alejandro Reyes.
Por otra parte, el gas natural representó la segunda fuente de generación con mayor capacidad. “Este recurso, aunque constituye una fuente fósil, tiene menores emisiones que otras de este tipo como el petróleo o el carbón y se considera una fuente de bajas emisiones”, explicó el investigador.
La concentración no solo se presenta en las fuentes de energía, también se observa en las plantas generadoras, de forma que seis plantas producen el 33 % de la energía eléctrica (Guavio, San Carlos, Chivor, Sogamoso, Porce III y Tebsab) lo que también representa un reto para el sector y para la generación futura de energía.
Este reto se vuelve más grande con la próxima entrada en funcionamiento de Hidroituango, que en plenitud de operación representará cerca del 15 % de la capacidad de generación eléctrica total actual.
Por otra parte, la capacidad de generación de energía eléctrica en Colombia ha crecido, en los últimos 20 años, en promedio un 1,7 %. A nivel regional, el centro del país es el mayor demandante de energía eléctrica, seguido por la Costa Atlántica y Antioquia, además, en los últimos 20 años la demanda de energía eléctrica ha crecido, en promedio, 5 % anual.
Colombia apunta a que 14 % de la matriz eléctrica sea de energías renovables
De acuerdo con el análisis, Colombia se encuentra entre los países con mayor participación de energías renovables, pero las no convencionales aún tienen baja participación. En este sentido, el objetivo del Gobierno es lograr que entre 12 % y 14 % de la matriz eléctrica para 2022 sea de energías renovables no convencionales.
La capacidad que tiene el país en generación renovable no convencional es buena, con condiciones geográficas y climáticas de alto potencial, según el análisis. Por ejemplo, para la fuente eólica, zonas como la costa norte, Santanderes, Boyacá, Risaralda, Tolima, Huila, Valle del Cauca, cuentan con un gran potencial de generación de energía eólica al tener una capacidad instalada potencial de más de 30 MW y vientos superiores a 9 m/s.
En energía solar hay una irradiación promedio de 4,5 kWh/m2/d superando el promedio mundial de 3,9 y el promedio de Alemania (3,0), país número uno en el uso de esta fuente. Hay regiones potenciales en la Costa Atlántica, Arauca, Casanare, Vichada y Meta donde se alcanzan irradiaciones de 6,0 kWh/m2/d.
En biomasa, se cuenta con ocho productos agrícolas potenciales para la producción de energía, tales como el bagazo de caña, la cascarilla de arroz, el fruto de palma de aceite, entre otros. Estos residuos podrían llegar a generar 96 kGWG de energía al año, lo que representa un 0,6 % de la demanda de energía de 2019.