Los colombianos son amantes de la cerveza y así lo reflejó 2022, que fue el año de mayor consumo por habitante. Si la demanda se rige por el precio, esta anualidad podría ser similar en ventas o, incluso, mejor para la industria cervecera, en la que Bavaria tiene una gran parte del mercado, con productos principales como Águila, Póker y Club Colombia.
El presidente de la cervecera, Sergio Rincón, habló del precio que manejarán este año para el producto, en medio de un costo de producción que sobrepasó barreras, impulsado por el dólar alto, la inflación, las tasas de interés y los mayores costos para las compañías, pues en 2023 se estrenará en Colombia la reducción de la jornada laboral, según lo aprobado a través de una ley.
Pese a ello, la cervecera realizó una inversión de dos billones de pesos, para abrir una nueva planta en un municipio muy pobre del Atlántico: Palmar de Varela, en el que vincularán -por al menos dos años- una planta de trabajadores de entre 8.000 y 12.000, toda vez que se tiene previsto que operará a partir de 2024.
El timonel de la compañía contó en SEMANA la forma en la que pilotean este 2023, para aplicar estrategias que impidan que le trasladen más costos al consumidor.
Protección del precio en ciertas marcas
SEMANA: aunque el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, tiene unas cuentas optimistas, con una expectativa de crecimiento para 2023, de entre 2 y 2,5 %, ¿cómo pinta el año para esta empresa?
Sergio Rincón (S. R.): el año va a ser retador. La ventaja es que eso todos lo sabíamos. Ha sido necesario conectar la alta inflación para el productor, con lo que pasa en la realidad del mercado.
Nosotros lo estamos enfrentando con una estrategia de portafolio. Tenemos unas marcas que protegemos, por ejemplo Nativa, que lanzamos en tres departamentos del norte del país y estamos lanzando ahora en el Valle del Cauca.
Lo que se hace es anclar el precio más bajo de la categoría, para lo cual, usamos insumos locales: yuca en el caso del norte, maíz en el caso del sur.
Jugador como local
De esa manera, dinamizamos la agricultura local, generamos una cadena de valor agrícola, y al consumidor le llevamos un producto con la calidad Bavaria, al precio más económico posible. Eso, a su vez, permite mantener al consumidor con el menor impacto posible. A ello hay que agregar toda una estrategia interna de eficiencias que nos permita llegar de mejor manera.
Otro instrumento para poder mantener precios es la digitalización del canal de los tenderos, mediante una plataforma que se llama Bees, que ha permitido capturar sinergias en costos, lo que hace que tengamos que trasladar menos al precio.
SEMANA: ¿podemos asegurarles entonces a los colombianos que el precio de la cerveza no va a subir de donde está?
S. R.: asegurar que no va a subir, con el panorama que tenemos hoy, es casi imposible. Lo que sí podemos asegurar es que haremos los esfuerzos máximos para que el traslado al precio sea el menor posible.
En la calle, ya tenemos activa una campaña de Poker, cerveza que no subió, se quedó en 2.000 pesos. Y vamos a anclar ese producto con ese precio.
El portafolio total seguramente tendrá alguna modificación, pero sí tenemos el compromiso de que el impacto que llegue al consumidor sea el mínimo posible.
SEMANA: ¿cómo enfrentarán el costo de los insumos con dólar por encima de 4.000 pesos, para mantener estables los precios?
S. R.: es una presión fuerte en muchos frentes. La buena noticia es que los fletes marítimos bajaron a niveles prepandemia. Eso le quita presión aparte del costo de la importación. Lo otro es que estamos trabajando en cadenas locales: yuca local, maíz local, que nos permite tener más insumos nacionales y variar -en menor medida- el precio externo.
Estamos trabajando con proveedores para traer capacidades locales. Es decir, proveedores que vengan a raíz de nuestra inversión en el país, a su vez, invertir en Colombia y generar una capacidad de insumos locales. Eso nos puede permitir no solo capotear lo que está pasando coyunturalmente, sino que podamos ser más competitivos a futuro.
Sin sacrificar el empleo
SEMANA: en este año difícil van a contratar más mano de obra, la dejarán estable o van a generar nuevas plazas.
S. R.: nosotros creemos en el crecimiento económico. Cuando eso pasa, también le apostamos a la generación de empleo.
SEMANA: ¿cree que el país podría aumentar su producto interno bruto (PIB), pueda crecer, inclusive, a 2,5 % como estima ahora el ministro de Hacienda?
S. R.: vamos con calma, pero estamos seguros de que la empresa es grande por su talento humano. Seguimos invirtiendo en la gente. No solo nos gusta traer más personal, sino desarrollar el talento que hay. Cuando Bavaria crece, hay un multiplicador en la economía.
Movemos seis millones de micronegocios en toda la cadena de valor. De manera que, cuando apostamos por crecer, traemos nuevas capacidades, mantenemos el precio de los productos. Es porque creemos que todo eso genera un entorno positivo para el empleo.
SEMANA: ¿la reforma tributaria que aplica desde este año les ha pegado duro?
S. R.: siempre habrá que trabajar con las condiciones que el país trace. Claro, hay impacto, pero nuestro trabajo es ver cómo, en ese horizonte, mantenemos la mira puesta en el crecimiento y el progreso.