Los empresarios se están preguntando cómo ayudar a superar la tensión social y a aportar para que el país mejore, luego del estallido social que se dio en Colombia, con un paro nacional que se extendió durante más de un mes, y puso en el escenario el sentir de la población, principalmente de los jóvenes, en relación con la falta de oportunidades.
Una de las respuestas posibles es, simplemente, haciendo lo que saben hacer sus compañías: invertir, crecer, generar empleo y dar utilidades.
Al menos así lo ven en la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá (ETB), que está metida en un proyecto que va a cambiarles la vida de muchos ciudadanos de la capital y sus alrededores, porque incide sobre un factor clave: la brecha digital.
Se trata de consolidar la más grande red neutral de fibra óptica, que significa duplicar la infraestructura ya existente y ponerla al servicio de cualquier operador de telecomunicaciones.
Eso no es otra cosa que pasar de una capacidad instalada, disponible para 1,2 millones de conexiones, a una de 2,4 millones.
“En el caso particular de ETB, lo más importante y lo que la pandemia nos ha mostrado como prioritario es la conectividad. Desde la compañía, este es el proyecto más importante”, explica Sergio González Guzmán, presidente de la empresa.
En este proyecto, la ETB va de la mano con Ufinet, una filial de la multinacional europea Enel. Ufinet desplegará la fibra óptica necesaria para alcanzar otros 1,2 millones de usuarios, mientras que ETB aportará la fibra óptica que ya opera.
El acuerdo entre ambas empresas permitirá crear una nueva empresa encargada de administrar esa infraestructura. “Esta red neutral permitiría que Bogotá se convierta en la ciudad más conectada de Latinoamérica. Así podríamos acelerar el proceso de transformación digital y con ello reducir la brecha digital”, sostiene González.
También por negocio
La apuesta hace sentido desde el punto de vista del modelo de negocio de ETB, porque se trata de una nueva fuente de ingresos. Para el directivo, este es uno de los focos para la compañía en su plan de desarrollo hasta 2030. Se trata de la estrategia que busca monetizar activos fijos como las redes.
La fibra óptica es una tecnología que va a adquirir cada vez más valor, porque el mundo digital implica un desafío: transportar las enormes cantidades de información que está produciendo la humanidad. En un escenario de internet de las cosas implica aumentos exponenciales en los datos que circulan.
Si bien la tecnología móvil 5G promete mayores capacidades y menores latencias, los hogares van a seguir necesitando conexiones sólidas y una oferta robusta para la última milla.
Por la justicia social
Al preguntársele sobre cuál es el papel de las empresas, para ayudar a superar las tensiones sociales que ha venido enfrentando el país recientemente, González aseguró que “lo más importante es que el empresariado mantenga la confianza en el país. Hay que continuar con las inversiones y apostarle, por supuesto, a la reactivación económica”.
El presidente de la compañía agregó: “Creo que todas las empresas tenemos que tener el mismo foco de mantener ese volumen de inversiones y creer que entre todos vamos a sacar esto adelante”.
Las compañías desempeñan un rol muy importante, no solo en reactivar la economía, sino en generar más oportunidades que conviertan a Colombia en un país más equitativo y con justicia social para todos.
En el sector de las telecomunicaciones, cualquier proyecto implica avanzar en la dirección correcta, porque uno de los nuevos escenarios de la equidad es el de las tecnologías de la información.
Acceso para todos es la verdadera revolución digital.