Ante la tercera ola de coronavirus que vive el país, en la que la ocupación de camas UCI ya se encuentra cercana a su máxima capacidad, varias entidades y gremios se han manifestado en contra de continuar con las marchas programadas para el 28 de abril, en las que varios movimientos se manifestarán en contra de la reforma tributaria, entre otras cosas.
En este caso, el comercio organizado del país expresó, a través de Fenalco, su preocupación por las consecuencias que sobre la salud y la economía de los colombianos tendrá la realización de la jornada de paro nacional, el próximo miércoles 28 de abril y le sugirió al Gobierno nacional “declarar de manera categórica, que ante la gravedad de la situación originada por la pandemia, es totalmente inconveniente desarrollar el paro convocado por el Comando Nacional Unitario”.
“En este momento tan difícil que atraviesa el país, el Gobierno debe impartir instrucciones a los alcaldes y gobernadores a través de los ministerios de Salud e Interior para que se abstengan de autorizar las marchas presenciales”, expresó el presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal.
El dirigente gremial manifestó que “es absolutamente frustrante para los empresarios del comercio, los restaurantes, hoteles y servicios en general que se les ahogue con restricciones, algunas de ellas de muy dudosa utilidad, que se les obligue a estar cerrados totalmente los fines de semana y que además se vean forzados a cerrar sus establecimientos muy temprano para que su personal logre llegar a sus casas antes del inicio del toque de queda, mientras que por otro lado se autorizan marchas multitudinarias que con plena seguridad elevarán los contagios”.
Cabal mencionó que el pasado 9 de marzo, durante una marcha de mujeres, autorizada por la Alcaldía de Bogotá para protestar contra la violencia de género, se produjeron “afectaciones a la seguridad y a la movilidad rompiendo estaciones, articulados y establecimientos comerciales”.
“No queremos imaginarnos el daño que la jornada del miércoles le va a causar, no sólo a la sociedad entera como quiera que inevitablemente los contagios aumentarán a la vuelta de una semana o menos, sino porque ya es bien conocido que personas desadaptadas realizan actos vandálicos”, agregó.
El vocero de los comerciantes también afirmó que, tal como el Gobierno ha impartido instrucciones con el manejo de las UCI, debe de igual manera ser enfático y advertir que ninguna aglomeración está permitida, mucho menos cuando en varias ciudades, entre ellas la capital, se ha declarado la alerta roja hospitalaria. “En este momento, dadas las circunstancias de la pandemia en el país es irresponsable salir a marchar”, dijo Cabal.
Así mismo, Fenalco hizo un llamado “a la sensatez para que el Comando Nacional Unitario convocante del paro, lo suspenda, aplace o convoque una protesta virtual tal como se hacen todas las actividades actualmente por la pandemia, puntualizó el líder gremial.
Procuraduría y Alcaldía también rechazaron las marchas
La alcaldesa Claudia López tomó una posición sobre la marcha del próximo 28 de abril. “Las marchas o aglomeraciones son en este momento un atentado a la vida. Le ruego a los diferentes dirigentes que tengan responsabilidad con la nación y con Bogotá. Eso es arriesgar la vida de la gente. Sería una irresponsabilidad que quienes no están de acuerdo con asistir a las aulas de clase, ahora sí promuevan aglomeraciones”, aseguró la mandataria.
La Procuraduría elevó su llamado a reconsiderar realizar las marchas convocadas para este miércoles 28 de abril en rechazo a la reforma tributaria y otros proyectos del Gobierno nacional.
En un comunicado, el Ministerio Público sostuvo que “al observar las alarmantes cifras de fallecimientos por causa del coronavirus que se vienen presentando en Colombia, el crecimiento de velocidad de contagio del virus, la confirmación de la presencia de dos nuevas cepas en algunas de las principales ciudades (...) y la escasez de oxígeno en varias regiones”.
Además, la Procuraduría llama a todos los mandatarios del país a reforzar las medidas que se vienen tomando para proteger la vida, al tiempo que insta a la población a acatar las recomendaciones que desde el sector salud se vienen realizando.