El gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria, hizo una advertencia sobre la forma en la que se está usando el vertedero de agua de Hidroituango, pues indicó que esto se hizo como una medida de contingencia y no es una medida adecuada a las exigencias de la obra.

Por esta razón, el funcionario señaló que las obras no se pueden detener, pues esa unidad no fue diseñada para estar evacuando agua constantemente, sino para un momento en el que se requería puntualmente.

“Yo quiero llamar la atención, poderosamente, sobre ese tema como gobernador de Antioquia, porque las funciones del vertedero como capacidad de un periodo largo de todo el caudal del río Cauca no son las adecuadas”, manifestó el gobernador.

Hidroituango | Foto: Esteban Vega La-Rotta / Publicaciones Semana

De igual manera, Gaviria agregó que no se debe detener la obra, por el contrario, hay que “poner a funcionar la central en términos pertinentes y los compromisos que han asumido, no sólo blinda desde el punto de vista económico, jurídico y técnico, sino que nos permite mayor tranquilidad sobre la seguridad de la vida de las personas en esos territorios”.

Cabe mencionar que varios rectores de universidades de Antioquia ya habían hecho la misma advertencia hace un tiempo, y alertaron de los peligros que podrían surgir en caso de que este vertedero siga funcionando de la manera en la que lo está haciendo.

William Giraldo Jiménez, vicepresidente de proyectos de generación de EPM, había señalado en una audiencia en el Concejo de Medellín que en la empresa estaban “tranquilos con el comportamiento de las losas del vertedero”.

“Desafortunadamente, el invierno ha sido fuerte. El invierno en el sur del país ha hecho que el río venga crecido y no ha sido fácil realizar esta revisiones sobre todo en el canal grande. En el cañal pequeño, lo hemos revisado dos veces en los últimos seis meses, hoy estamos tranquilos con el comportamiento de las losas del vertedero”, indicó Giraldo.

Al alcanzar la cota de 405 metros, el embalse del proyecto hidroeléctrico de Ituango comenzó a verter agua, de forma segura y controlada, a través de una estructura diseñada para tal fin, según informó Empresas Públicas de Medellín (EPM) el pasado 11 de noviembre de 2018.

Se trata de un vertedero: una estructura hidráulica que permite el paso libre o controlado de agua en las centrales de generación. Por esta construcción, con una longitud de 405 metros y cuatro compuertas radiales de 15,4 metros de ancho por 19,5 metros de alto, pasará el agua desde el embalse hasta caer a un pozo de aquietamiento, y luego al imponente y caudaloso río Cauca.

El vertedero, con un tamaño semejante a cuatro canchas de fútbol, permite rebozar el agua cuando el embalse llega a su máximo límite de capacidad, lo que garantiza una seguridad de la presa y evita que el agua embalsada rebose la estructura, según explicó la empresa a través de un comunicado de prensa.

BID se retirará del proyecto si hay cambios en los contratistas

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) advirtió que, si hay cambio de contratistas en Hidroituango o una cesión del contrato, se retirará del proyecto. Así lo confirmó SEMANA con fuentes de alta credibilidad.

El BID considera que, de darse algunos de estos cambios en las condiciones del proyecto, se afectará gravemente la credibilidad en el mismo. Por esa razón, si el banco se retira, la financiación de la megaobra se vería afectada de manera grave y quedaría en el limbo su continuidad.

Ahora la prioridad debe ser terminar la obra en los tiempos estipulados para que pueda entrar en funcionamiento a mediados del 2022.

“El BID no se prestará para las disputas y tensiones políticas que han surgido alrededor de la hidroeléctrica, en cuyas manos está el futuro energético del país”, le dijo a SEMANA una fuente enterada del proceso.