Este miércoles 20 de septiembre, el ministro de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC), Mauricio Lizcano, volvió a enviar un ultimátum a Tigo-UNE para que anuncien las decisiones que se adoptarán respecto al futuro de la compañía.
“El Gobierno ha estado muy atento. Los mensajes del Gobierno son: defender el patrimonio público, no permitir que la empresa se acabe y mantener el mercado de las telecomunicaciones en Colombia”, dijo el jefe de la cartera, en diálogo con Blu Radio.
Y añadió: “Es lo que he dicho siempre, si el 11 de octubre no hay un acuerdo o capitalización por parte de los socios, o dilución con aprobación del Concejo, o una solicitud de entrar a la Ley 1116 capítulo 11, el Gobierno entraría a salvar la empresa, porque no vamos a dejar que la empresa se acabe”.
Lizcano ya había explicado que en la empresa la “situación es delicada” y explicó en ese momento que el Gobierno le extendió el plazo hasta octubre para presentar una garantía para el uso del espectro. Ante sus números en rojo, la empresa no logró conseguir dicha garantía en septiembre.
A su vez, en reiteradas ocasiones, Daniel Quintero Calle, alcalde de Medellín, mencionó que UNE EPM Telecomunicaciones tenía serios problemas financieros. Y, según cifras oficiales, entre enero y marzo la operación arrojó pérdidas por $148.397 millones.
Las pérdidas de la empresa alcanzaron los 473.000 millones de pesos durante el año pasado. Los máximos accionistas de Tigo-UNE son EPM (50 %), el Instituto de Deporte y Recreación (0,0001 %) y la multinacional Millicom (49,99 %).
“En general, cuando una empresa llega a tener un patrimonio negativo, entra en causal de reorganización o liquidación, eso es general para todas las empresas. Han pedido a EPM una capitalización, pero EPM, para poder dar plata a una empresa que lo ha hecho mal, que ha administrado mal, esa empresa que se llama Millicom, debe demostrar que el dinero no se perderá, y hasta el momento no ha podido hacerlo”, señaló Daniel Quintero, alcalde de Medellín.
Las discusiones que vienen antes de la asamblea de este jueves 21 de septiembre
Para este jueves 21 de septiembre fue convocada una Asamblea Extraordinaria de Accionistas de Tigo-UNE, tras la reunión del pasado viernes de la junta directiva, en la que no se aprobó el reglamento de emisión y colocación de acciones para una capitalización de la compañía.
Recientemente, la empresa ha explicado que, a la fecha, todos los servicios fijos y móviles se vienen prestando sin ninguna novedad.
Durante el último mes, el tráfico de datos en la red móvil creció un 3 % y el tráfico de voz un 6 %. En un comunicado, la empresa también señaló que para 2023 había invertido más de 100 millones de dólares en el despliegue y mantenimiento de sus redes, su base de clientes de pospago había crecido en más de 21 % y sus servicios digitales para empresas y gobiernos habían aumentado más del 35 %.
Pese a su desempeño, Tigo-UNE necesita capitalización, como advirtió uno de sus propietarios, Millicom. En carta firmada por el director general de la multinacional, Mauricio Ramos, al ministro de las TIC, Mauricio Lizcano, indicó que se necesitan recursos por 150 millones de dólares y que esperan que los socios Millicom y EPM los aporten. Si EPM no está de acuerdo, Millicom emitirá el monto total.
EPM ya manifestó que no capitalizará Tigo-UNE y las discusiones se han centrado en el proceso de dilución de Empresas Públicas de Medellín en la empresa. Incluso, el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, quien también es presidente de la junta directiva de EPM, indicó que Millicom retendría el 98 % de Tigo-UNE luego de que se aprobara la dilución “forzada”, mientras que EPM tendría alrededor del 2 %.
Millicom le respondió al alcalde en un comunicado, indicando que EPM no se ha diluido. “Esta capitalización no representa dilución alguna para los accionistas que aporten capital. La decisión de cada accionista sobre capitalizar o no la compañía le corresponde individualmente a cada accionista. EPM no ha sido diluida y mantiene la posibilidad de aportar su parte del capital y mantener su participación accionaria”, señaló la multinacional.
No obstante, Quintero dijo en entrevista con SEMANA que Millicom estaba mintiendo. “Invitó a una asamblea en la que se iba a discutir la capitalización y de forma sorpresiva cambió el orden del día y lo que propuso de inmediato fue una dilución. Incluso presentó un reglamento de dilución en el que deja a EPM con el 2 %. Como EPM se negó a votar ese proceso de dilución que requería mayorías especiales, lo que hizo Millicom fue desde la asamblea ordenar a la junta tomar la decisión, pero con mayorías simples; es decir, sin el voto de EPM”, dijo el alcalde.
“Estamos ante esta toma hostil por un administrador que es Millicom”, agregó Quintero.
Tras la junta del viernes pasado, SEMANA conoció un documento en el que se hacen algunas consideraciones de por qué no se aprobó el reglamento de capitalización, las discusiones jurídicas que se han planteado, las financieras y hasta las de conflictos de intereses de los miembros de la junta a la hora de votar el reglamento.