El banco HSCB comunicó este viernes que redujo su tasa de interés para crédito hipotecario a menos del 1 %, entrando en la guerra del interés en Inglaterra, en medio de una tendencia de crecimiento de los precios de las viviendas.
Los economistas del país han descrito la situación hipotecaria en el país como “en llamas”, pues la cantidad de inversiones en vivienda ha crecido y las entidades financieras están compitiendo por tener cada vez más una mayor cantidad de clientes, por lo que la tasa de interés juega un papel fundamental.
Es por esta razón que la tasa de interés para créditos a plazo fijo de dos años para aquellos con depósitos o capital de al menos 40 % en un 0.05 %, bajándola a 0.99 %. Esto significa que las cuotas para quienes adquieren los productos son de por lo menos 999 libras (US$ 1.379,09 dólares).
La medida está enfocada para los usuarios que quieren ascender en el mercado hipotecario o ya tenían un acuerdo de tasa fija, por lo que pueden acceder a “algunas de las tarifas más bajas que hemos ofrecido durante un tiempo”, señaló HSBC en un comunicado.
Sin embargo, los acuerdos y las menores tasas estarán solo disponibles para quienes tengan una calificación crediticia limpia y confiable, así como un nivel de ingresos moderados y constantes, y un “depósito muy grande disponible”, dijo Matthew Fleming-Duffy, director de Cherry Mortgage & Finance al diario The Guardian, refiriéndose al cupo al que pueden acceder los prestamistas.
Entre 2020 y los primeros meses del 2021, los precios de la vivienda en Reino Unido han crecido a un nivel del 10,9 %, el ritmo más alto en los últimos siete años según registran las autoridades locales.
En promedio, en mayo los precios crecieron casi un 1,8 %, mientras que en abril fue del 2,3%. Esto significa que una vivienda en Gran Bretaña pasó de costar 218.000 libras (US$ 300.927 dólares) a casi 242.000 libras (US$ 334.057 dólares).
Ante las condiciones y las garantías que deben presentar los usuarios, Fleming-Duffy señaló que “estos productos son excelentes para una minoría de consumidores y ciertamente colocan a estos prestamistas en la parte superior de las tablas de mejor compra, pero para muchos prestatarios potenciales, con necesidades más complejas o depósitos más pequeños, estas tasas atractivas están lamentablemente fuera de su alcance”.
Este mismo viernes el HSBC anunció que venderá por un euro simbólico (US$ 1,19 dólares) su actividad minorista en Francia al banco francés My Money Group, filial del fondo estadounidense Cerberus.
En un comunicado indicó que esta operación por un euro implica la transferencia de alrededor de US$ 22.500 millones de dólares en préstamos, sobre todo inmobiliarios, y US$ 24.911 millones en depósitos.
Para la entidad británica, inmersa en una reorganización para centrar su operativo en Asia, la venta se traducirá en una pérdida en sus cuentas, antes de impuestos, de alrededor de US$ 2.250 millones. My Money Group indicó que se hará con 244 puntos de venta física y con 3.900 colaboradores que atienden a 800.000 clientes en Francia.
“Vamos a comprar las deudas, los equipos, los depósitos y los clientes”, señaló a la prensa Eric Shehadeh, consejero delegado del banco francés. En cambio, no quedan incluidas en el traspaso las actividades de seguros y de gestión de activos de HSBC en Francia.
La integración de las actividades minoristas de HSBC Francia se alargará durante dos años, dijo Shehadeh, que se dio de “tres a cuatro años” para dar rentabilidad a esta red. El directivo indicó que “no habrá ningún plan de restructuración, si es que lo hay, antes de 2024-2025” y prometió una inversión de “US$ 237,5 millones antes de la culminación de la transacción” en la arquitectura informática y la optimización de los procesos internos.
Este anuncio es la culminación de un largo proceso para HSBC, que desde 2019 estaba realizando una revisión estratégica de su actividad minorista en Francia debido a un contexto difícil, marcado por la desaceleración de la economía mundial y la persistencia de unos tipos de interés históricamente bajos en Europa.