La quiebra es uno de los procesos por los que ninguna empresa quiere pasar en el mundo, pero al que todas están expuestas. Normalmente, este escenario sucede cuando una empresa no puede continuar operado debido a un escenario de grandes dificultades económicas. En diferentes países existen legislaciones que pueden ayudar a las compañías a sortear estos problemas, que en su mayoría son de orden financiero.
Dentro del proceso, uno de los primeros pasos que debe seguir una empresa es iniciar una solicitud ante la autoridad competente del país, alegando una inviabilidad financiera. Comúnmente esto sucede cuando cuentan con un patrimonio negativo. Es decir, cuando las empresas tienen una mayor cifra en pasivos que en activos. En pocas palabras, cuando deben más de lo que tienen.
Aunque este proceso puede traer un escenario favorable, en el que las empresas empiecen a retomar su operación y saldar sus deudas, esto también puede traer otro escenario catastrófico, en el que la compañía no logre un acuerdo con los acreedores y deba iniciar su proceso de liquidación y despido masivo.
Hace poco se conoció la situación de una importante empresa mexicana que estaría enfrentando este difícil escenario. Se trata de la siderúrgica Altos Hornos de México, conocida como Ahmsa, que se vería obligada a declararse en quiebra. La empresa tendría poco tiempo para cumplir un acuerdo hecho con los acreedores, por lo que tendría que iniciar su liquidación.
Es preciso recordar que un juzgado especializado fijó la fecha límite para el acuerdo, a más tardar el 4 de agosto. La situación genera alta incertidumbre debido a que necesita que todos sus acreedores firmen un convenio antes de la fecha mencionada, para que la compañía se pueda capitalizar y reanudar sus actividades comerciales, que fueron suspendidas paulatinamente desde finales del 2022, según indica el portal BnAmericas.
La semana pasada, la empresa envió un comunicado a la bolsa mexicana, en el que informaba que había interés por parte de nuevos inversores, por lo que explorarían nuevas opciones para evitar una declaración de bancarrota.
Pese a ello, de otro lado no hay tanto optimismo sobre la recuperación de la siderúrgica, pues se presenta un nivel elevado de pasivos en la compañía y la cantidad de recursos para reactivar su funcionamiento no sería la adecuada. De hecho, Capital Analyst asegura que la deuda de la empresa superaría los 1.000 millones de dólares.
Aunque han recibido propuestas de diferentes empresas del sector, lo cierto es que no se ha concretado ningún acuerdo. De hecho, el fondo estadounidense Argentem Creek se comprometió a inyectar 200 millones de dólares para aportar a la operación de la empresa. Pese a ello, ese acuerdo no llegó a feliz término.
La minera se une a una serie de empresas que este año han pedido ayuda al no poder sortear la desaceleración en sus modelos de negocio. Es preciso recordar que la Golondrina, uno de los restaurantes de comida mexicana más tradicionales de la histórica calle Olvera de Los Ángeles, sorprendió a todos sus clientes esta semana y anunció en su cuenta oficial de Instagram que lamentablemente se tenía que declarar en bancarrota.
Mediante un corto comunicado de prensa, el establecimiento comercial manifestó que desde hace años enfrenta una demanda contra la ciudad estadounidense, la cual se ha vuelto insostenible económicamente debido a los altos costos. Asimismo, aseguró que la alcaldía nunca les brindó una solución real.
“Nos entristece anunciar que nos declaramos en quiebra hace unos meses. Nuestra demanda contra la ciudad de Los Ángeles y la alcaldía se volvió demasiado costosa. Después de gastar todos nuestros fondos y el dinero donado, no pudimos continuar con la demanda. Sabemos que tuvimos un caso ganador sólido, pero desafortunadamente nunca llegamos a juicio”, indicó inicialmente.