El sector turístico colombiano se encuentra preocupado por los impactos que tendrá la economía nacional para este 2023, debido al comportamiento de los precios a raíz del sorpresivo incremento que tuvo el costo de vida en el país al cierre del año pasado, cuando la inflación se ubicó en 13,12 %, según datos entregados por el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (Dane).
Para este reglón de la economía —que representa el 3,5 % del Producto Interno Bruto (PIB) nacional y que es uno de los principales generadores de empleo en el país—, el informe sobre el Índice de Precios al Consumidor (IPC) deja para esta industria un panorama desfavorable por el comportamiento que registraron los precios del transporte de pasajeros y equipaje en avión. Igual que los paquetes turísticos, los cuales incrementaron en un 28 % y 14 %, respectivamente.
Esta situación tiene a volverse más compleja, debido a que para este año el costo de los tiquetes aéreos pasaría de tener un IVA del 5 % a uno del 19 %, como consecuencia de que finalizó la exención tributaria que se estableció para los servicios turísticos, como medida para reactivar a la industria tras superarse la emergencia por la pandemia de la covid-19.
Lo anterior se traduce en que para este 2023 resultará mucho más costoso para los ciudadanos acceder los productos y servicios del sector turístico; esto afectará el proceso de recuperación por el que venía esta industria, tras más de un año de inactividad.
De acuerdo con Paula Cortés Calle, presidente ejecutiva de la Asociación Colombiana de Agencias de Viajes y Turismo (Anato), este panorama puede poner en riesgo todo el esfuerzo que se realizó desde el año pasado y que se vio reflejado en un dinamismo en el flujo de viajeros, tanto aquellos que circularon entre los diversos destinos internos, como aquellos que salieron e ingresaron al país.
“Hemos trabajado por la recuperación de las empresas, por dinamizar el turismo y eso nos ha dejado muy buenos resultados. Sin embargo, iniciamos el 2023 con un escenario desfavorable, que sin duda dificultará continuar con el ritmo que veníamos teniendo y es por ello que se requiere un espaldarazo adicional que nos ayude a seguir recuperándonos”, señaló.
Así mismo, expresa la dirigente gremial que espera que esta situación “no desincentive los viajes nacionales e internacionales”, al tiempo que manifestó que se hace necesario que desde el actual Gobierno se brinden condiciones para apoyar a este sector tan importante de la economía.
“Tras la pandemia, recibimos un respaldo del Gobierno que ayudó a los empresarios, de una industria gravemente afectada, a solventar las complicaciones en sus ventas y el personal ocupado. Sin embargo, bajo este escenario tendremos que reevaluar acciones en busca de promover los viajes”, concluyó la dirigente gremial.
Así, las perspectivas de crecimiento que había proyectado el gremio de las agencias de viaje entró en evaluación, debido a que antes de conocerse el dato de la inflación para diciembre y balance del 2022, se había estimado un incremento superior al 6 % en el flujo de llegada de turistas al país.
Esto significaría un arribo entre 4,9 y 5,1 millones de visitantes no residentes. Mientras tanto, la meta para el cierre del 2022 está en que al país llegaron 4,6 millones de turistas, principalmente, por vía aérea.
Por otra parte, en el caso de colombianos que viajan al exterior, las proyecciones también tendrían que ajustarse, debido a que, con un mayor incremento en los paquetes turísticos y de los tiquetes aéreos, es muy probable que se desestimule el interés por salir del país.
Se había previsto un alza entre el 4 % y el 10 % en la salida de nacionales al extranjero para este 2023, pasando a estar la cifra en, aproximadamente, 5,4 millones de colombianos.