Una de las mayoreas controversias que rodean al sector delivery en Colombia tiene que ver con la rampante informalidad laboral que sufren los colaboradores de exitosas aplicaciones como Rappi o iFood, entre otras. En medio de este panorama de incertidumbre, una compañía colombo-mexicana, con capital alemán, llegó al país en abril de 2021 con una propuesta de valor interesante: la ética por encima de los negocios. O al menos eso es lo que promulgan.
Germán Peralta, cofundador y general manager de Latinoamérica del Norte (así denominan a su franja que comienza en México) en JOKR, habló con DINERO de su operación en Colombia y sus expectativas para superar a importantes marcas de domicilios, como Merqueo.
DINERO: ¿De qué se trata su aplicación?
Germán Peralta (G. P.): Nuestra compañía lleva hasta los hogares de los colombianos toda clase de productos que normalmente se encuentran en un supermercado, los cuales se pueden pedir desde nuestra aplicación y son despachados en Bogotá.
DINERO: Normalmente las ‘apps’ de domicilios suelen tener nombres amigables y fáciles de recordar... Su nombre en inglés es “Joker” (guasón, arlequín), ¿A qué se debe dicha elección?
G. P.: Nos llamamos JOKR porque el joker es un comodín, una carta de fortuna que te ayuda siempre y nos identificamos con ese tipo de servicio. El nombre es en inglés porque si bien creamos la app en México a comienzos de 2021, nuestros socios se encuentran en Alemania, por lo cual buscamos expandirnos en varios continentes.
DINERO: Llegaron a Colombia anunciando que se convertirían en la ‘app’ número uno en domicilios de supermercado, aunque este es un renglón muy competido, encabezado por Merqueo, que se posicionó en medio de la cuarentena nacional de 2020. ¿Cómo piensan destronar al líder actual?
G. P.: Entregamos más rápido que cualquiera de nuestros competidores y sin recargo alguno. También tenemos alianzas con proveedores locales, lo cual garantiza que podamos tener más de 2.000 productos en cada tienda, entre cárnicos, frutas, verduras, lácteos, productos empacados, bebidas alcohólicas, accesorios tecnológicos, medicamentos que no requieran receta, artículos de limpieza y aseo personal. Todo listo para salir.
DINERO: En su publicidad prometen entregas en menos de 15 minutos. Es difícil creer que eso sea posible, teniendo en cuenta el tráfico imposible de una ciudad como Bogotá...
G. P.: Sí es posible. En junio entregamos el 95 % de los pedidos por debajo de los 15 minutos y sin error alguno en lo pedido. Cubrimos con nuestras tiendas la zona norte hasta la calle 170 y Chía; el occidente desde Suba hasta la calle 13, pasando por Engativá y Fontibón, así como el centro-oriente, donde estamos en Teusaquillo, Chapinero y Usaquén.
DINERO: Con un modelo de negocio similar al de las otras aplicaciones de domicilios, ¿por qué se han comprometido a contratar de planta a sus empleados, cuando otras no han podido o querido?
G. P.: Antes que nada nosotros tenemos la intención de garantizar un trabajo digno para nuestros colaboradores. Como somos dueños de la cadena completa de distribución, entonces nuestro margen de ganancia es mayor y eso nos permite poder pagar sueldos fijos.
DINERO: ¿Cuántas personas trabajan actualmente de planta en JOKR Bogotá?
G. P.: Tenemos 105 repartidores, 35 auxiliares de bodega y 30 coordinadores de turno. Además, tenemos un equipo administrativo que se encarga de toda la operación. Todos gozan de un contrato a término fijo directamente con nosotros y con todas las prestaciones de ley, además del pago de seguro de riesgos profesionales.
DINERO: ¿A qué se refiere cuando habla de ser dueños de la “cadena de distribución”?
G. P.: Nuestro negocio se parece más al de las grandes tiendas de superficie en Colombia. Nosotros compramos de antemano todos los productos que vendemos y los llevamos a una de nuestras 15 bodegas en Bogotá. Desde allí son despachados por nuestro equipo y enviados a los clientes que pidieron por la app a través de nuestros propios repartidores. Así tenemos control sobre todo el proceso.
DINERO: ¿Y con repartidores ‘freelance’ como los de Rappi no podrían hacer el mismo trabajo de entregas?
G. P.: Tener trabajadores externos, a los cuales no se les puede entrenar o capacitar formalmente, no es viable. Nuestro modelo se sustenta en un servicio al cliente de calidad, productos confiables y velocidad en la entrega. Ese es el secreto de nuestro éxito.
DINERO: En su mapa no veo sus puntos de entrega en el sur de Bogotá. ¿Los tienen?
G. P.: Esperamos llevar nuestro servicio al sur de Bogotá a principios de enero de 2022.
DINERO: ¿Y a otras ciudades de Colombia?
G. P.: Aunque queríamos llegar a grandes ciudades como Medellín, Cali, Bucaramanga y Barranquilla, los bloqueos viales y la inestabilidad en los suministros lo hicieron imposible. Pensamos intentarlo de nuevo en octubre de este año.
DINERO: Comprar de antemano los productos que van a vender y cubrir los sueldos de todo su equipo no debe ser nada fácil, teniendo en cuenta que la ‘app’ fue creada en enero de 2021 y que llevan apenas un par de meses en Colombia. ¿De dónde sacan el músculo financiero para sostener su operación en este arranque?
G. P.: La inversión para esta app proviene de compañías multinacionales del sector de tecnología, como Tiger, GGB y Balderton. Nos dieron 170 millones de dólares a comienzos de este mes y progresivamente esta cifra irá aumentando. Confiaron en nosotros porque tenemos un equipo con mucha experiencia en el sector delivery, quienes vienen de la aplicación DeliveryHero, la cual llevamos a la bolsa de valores de Fráncfort en 2017.
DINERO: ¿Cuál es su mensaje para los consumidores colombianos?
G. P.: Llegamos para quedarnos.