Organizaciones de camioneros y el gremio transportador lanzaron un SOS al Gobierno nacional y a las autoridades de las diferentes regiones en el país para que presten atención a lo que está pasando en las carreteras del país, en materia de seguridad, por cuenta del paro armado del Clan del Golfo. Y es que las consecuencias de esta escalada terrorista ya ha hecho que las pérdidas económicas sean muy altas y que la cifra siga subiendo.
Uno de los primeros en pronunciarse fue Colfecar, gremio que reúne a las principales empresas transportadoras del país. Sostuvo que hasta el momento se han reportado pérdidas superiores a los 13 mil millones de pesos, a raíz de esta situación que afecta principalmente a los departamentos de Antioquia, Bolívar, Córdoba, Sucre, Cesar y Atlántico.
Ante esto, la presidenta ejecutiva de Colfecar, Nidia Hernández Jiménez, rechazó enfáticamente los atentados terroristas que se han registrado contra 32 vehículos, que han sido incinerados y abarcan desde camiones hasta tractomulas. Las quemas se han dado en vías principales y secundarias de estos departamentos del país.
“Confiamos en que aparte del cubrimiento de la póliza de terrorismo que deben tener nuestros transportadores, también se refuercen las acciones de acompañamiento del Ejército y la Policía en las caravanas que se han programado para garantizar la movilidad por las diferentes carreteras del país”, señaló Hernández Jiménez.
Entre tanto, las cifras de la Asociación de Transportadores de Carga (ATC) dan cuenta de un panorama mucho más preocupante, ya que sus estimaciones se acercan a los 66 vehículos incinerados (entre carga, pasajeros y particulares), en menos de 56 horas.
Anderson Quinceno, CEO de la ATC, manifestó que no hay condiciones para trabajar, al tiempo que les recordó a las autoridades el gran número de familias que dependen del transporte de carga, ya que no son solamente los conductores los afectados, sino propietarios, empresas y hasta consumidores.
“Hemos visto que en las carreteras, principalmente en Antioquia, se está afectando a todo el que pasa, lo cogen y le queman el vehículo, hemos visto incluso ataques a ONG que solo están garantizando los derechos de la gente. Esta situación es bastante delicada y creemos que se necesitan acciones urgentes” agregó Quinceno.
La ATC sostuvo que, pese a que en este momento las autoridades aseguran que las afectaciones de orden público se dan por culpa del paro armado decretado por el Clan del Golfo tras la extradición de su máximo líder, alias Otoniel, los ataques a vehículos de carga son un flagelo que los afecta desde hace mucho tiempo.
“Siempre que hay un paro, una huelga o cualquier alteración del orden público, lo primero que hacen es arremeter contra los transportadores y sus vehículos. Los paran, los saquean, los queman o arman bloqueos con los cuales quedamos metidos en trancones, haciendo que tengamos que vivir una situación insostenible”, dijo el vocero de esta agremiación.
Los representantes de los camioneros y las empresas transportadoras hicieron un llamado urgente al Gobierno para vincular a los transportadores de manera coordinada a las caravanas, a fin de poder garantizar su seguridad y la protección de los automotores. Resaltan que la situación de orden público es muy preocupante.
Así mismo, Colfecar lamentó el asesinato del conductor Giovanni Grandas Torres, que se movilizaba por la vía Bosconia, y el estado de salud de los conductores que están gravemente heridos. Igualmente, lamentó las afectaciones a la población civil. Por ello, reiteró su llamado al ministro de Defensa, Diego Molano, a la adopción de medidas más contundentes que garanticen la vida de los conductores y la movilización de la carga en los departamentos de Antioquia, Bolívar, Córdoba, Sucre, Cesar y Atlántico.