La pandemia ya casi pasa del todo y con esto, cada vez más empresas inician el camino de la reactivación económica, con miras a recuperar lo perdido por cuenta del confinamiento que afectó a muchas empresas en el país por casi un año. Cabe resaltar que uno de los sectores más golpeados en ese entonces, fue el del turismo.

Por culpa de la covid-19, muchos lugares dejaron de ser visitados y con esto se perdieron muchos puestos de trabajo y los miles de millones de pesos que mueve esta economía, de la que dependen muchas familias en todo el país. No obstante, tan pronto como empezó la nueva normalidad, el turismo fue uno de los primeros en reinventarse.

Playas, museos y parques, entre otros, presentaron sus nuevas ofertas, ampliaron sus servicios y buscaron métodos para innovar; todo con el fin de atraer a visitantes. Uno de estos sitios, considerado como una de las maravillas de Colombia, fue la Catedral de Sal de Zipaquirá (Cundinamarca).

En entrevista con SEMANA, Yenny Páez Sabogal, gerente general de la Catedral, aseguró que actualmente se están preparando en este emblemático punto del centro del país, para llevarlo a un nuevo nivel, con miras a aumentar la llegada de turistas y a generar nuevas fuentes de ingreso que no dependan únicamente de esto.

Yenny Páez Sabogal - Gerente Catedral de Sal | Foto: Más Media

“Fueron más de ocho meses en los que tuvimos que mantener nuestras puertas cerradas, lo que sin duda fue un golpe bastante fuerte. Sin embargo, cuando yo llego a esta administración en enero de este año, veo que hay muchas ganas de salir adelante, de recuperarse y con eso arrancamos, teniendo claro siempre que debemos llegar más alto de lo que estábamos antes de la pandemia”, dijo esta directiva.

Según lo contado por la gerente de la Catedral, si bien lo primero que se hizo fue volver a atraer a los turistas, las directivas de este emblemático lugar tuvieron claro la lección aprendida, frente a la necesidad de diversificar su oferta de servicios, para no depender únicamente de esto.

“Venimos de hacer unas inversiones bastante importantes para llevar a la Catedral de Sal al siguiente nivel y convertirla también en un salón de eventos, en un sitio de encuentros para las empresas que lo necesiten. Tenemos una arquitectura única en el mundo y precisamente es lo que queremos explotar, mediante el acondicionamiento de dos cámaras solo para esto”, agregó Sabogal.

Las perspectivas de inversión para esta nueva apuesta, con la que se busca convertir este sitio en un centro de convenciones y de reunión para grandes eventos, se aproximan según su gerente a los 3.000 millones de pesos, “no obstante dependemos del flujo de caja con los eventos”. Es fundamental resaltar que esto no desplazará su atractivo turístico, el cual seguirá abierto para quienes lo quieran conocer.

“Estamos hablando de un espacio en el que las paredes hacen parte de una mina de sal, que tiene toda una historia y tradición por conocer. Le apuntamos a ser ese centro en el que las empresas hagan sus lanzamientos de marcas, sus reuniones ejecutivas o cualquier tipo de evento importante. También para eventos deportivos o culturales”, dijo esta vocera.

Con un promedio de más 600 mil visitantes por año, la atracción de turistas es por ahora el fuerte de la Catedral de Sal de Zipaquirá, y precisamente desde allí es desde donde quiere trabajar la nueva administración para la atracción de empresas nacionales y extranjeras, reconociendo que han sido “muy tímidos” hasta el momento.

Catedral de Sal | Foto: Más Media

“Ya hemos tenido eventos con 200 o 300 personas y nos ha ido muy bien. Ahora la meta es combinar ese éxito con el que siempre hemos tenido en la visita de turistas y así posicionar este lugar como uno de los más importantes para conocer en el país. Este año esperamos recibir cerca de 650 mil visitantes, solo en Semana Santa fueron más de 37.000 mil”; explicó Yenny Sabogal.

Por último, sin obviar que la naturaleza del sitio es religiosa, en esta entrevista con SEMANA; la gerente de la Catedral de Sal indicó que en el nuevo nivel al que le están apostando, también quieren concentrarse en destacar la arquitectura y la historia, así como toda la connotación cultural que encierra; aspecto en el que ya vienen trabajando con colegios y universidades en el país.

“Sin desconocer que tenemos una connotación que parte desde lo religioso, le estamos dando a conocer a todos la historia y la importancia de este espacio, que es considerado como la primera maravilla de Colombia. Sin duda tenemos mucho que aportar y eso precisamente es lo que queremos resaltar de ahora en adelante, sin quitar que somos una catedral”, concluyó.