Santiago Chamorro, presidente de GM para Sudamérica, anunció el cierre definitivo de la planta de producción de la compañía en Bogotá, tras 70 años de historia en el país.
La decisión, según contó el empresario en SEMANA, se debe a la “presión competitiva grandísima” que ha experimentado la industria automotriz colombiana en los últimos años, producto de la apertura comercial y la baja producción local.
El cierre de la planta afectará a 550 trabajadores, a quienes la compañía les ha ofrecido un paquete de transición laboral que incluye reubicación en otras empresas, apoyo para crear microempresas y asistencia para encontrar nuevas oportunidades de empleo.
Chamorro aseguró que la mayoría de los trabajadores ya ha firmado sus cartas de mutuo acuerdo y se está acogiendo a estas posibilidades.
“Primero un mensaje de gratitud a todos ellos, a todos los que esta historia pasaron en GM Colmotores, un mensaje de esperanza, de que puedan hacer sus vidas en adelante, sea en nuevos empleos. Estamos ayudándolos en ese proceso de transición laboral. Y el mensaje que reitero es que realmente hicimos todo lo posible y les agradezco muchísimo la resiliencia, el cariño que le pusieron al trabajo e increíble el resultado del mismo con vehículos que los colombianos pudieron disfrutar”, contó en diálogo con SEMANA.
Así mismo, Chamorro contó que desde la empresa están haciendo importantes esfuerzos para ayudar a reubicar a los empleados que se quedaron sin trabajo tras el cierre de la planta de GM Colmotores. “Les hemos hecho una oferta por encima de los temas legales, que incluye un paquete de transición laboral que quiere ayudar a nuestros empleados a mejorar su perfil para empleos en otras empresas, a ayudar a los que son microempresarios o tienen esa idea a que consigan de forma positiva una nueva posibilidad de ingresos a sus familias”, dijo a SEMANA.
“Este paquete incluye la reubicación en otras empresas en el mercado, que estamos preparando para que salgan en este mercado laboral. Registro que una inmensa mayoría firmó ya sus cartas de mutuo acuerdo y se está acogiendo a estas posibilidades”, contó Chamorro sobre las ayudas que se les están brindando a los exempleados.
Así mismo, la planta de producción no será demolida, sino que GM Colmotores está evaluando diferentes opciones para su futuro. Una de las posibilidades es utilizarla como un centro de distribución o de servicios para la región.
“Tenemos un proceso de transición, de si hay materiales, equipos, que queremos ver cómo se reusan en algunas otras operaciones alrededor del mundo”, dijo Chamorro.
“Hay materiales que tenemos que ver cómo se reciclan y, obviamente, algunos de ellos tenemos que ver cómo se chatarrizan. Y posteriormente, tenemos destino final de ese lote, que se nos ocurre que puede ser una buena solución para la ciudad de Bogotá, por su ubicación y por sus condiciones”, narró el presidente de GM para Sudamérica.
A pesar del cierre de la planta de producción, GM Colmotores seguirá presente en el mercado colombiano a través de su red de concesionarios, la marca Honda, Chevyplan, GM Financial y el servicio de posventa. “Estamos optimistas y seguimos muy presentes en el mercado colombiano”, dijo Chamorro. “Creemos que hay oportunidades para seguir creciendo en el país”, puntualizó.
Sobre las razones del cierre de la planta, Chamorro manifestó que, a pesar de las inversiones realizadas en los últimos años, como la construcción de una planta de estampado en piezas metálicas y la producción del Chevrolet Joy, la baja utilización de la planta y los resultados financieros negativos obligaron a la compañía a tomar la decisión de cerrar las operaciones.
“Los resultados financieros no son buenos y se hacen insustentables en el largo plazo”, afirmó Chamorro. “Por esa razón, tomamos la decisión de no continuar con la producción, pero comercialmente seguimos adelante”, contó en entrevista con SEMANA.